Doce cámaras estarán instaladas bajo la cubierta del estadio Rey Fahd de Riad durante la disputa de la Supercopa para hacer efectiva la tecnología semiautomatizada para la detección de fuera de juego, una herramienta de vanguardia que ayudará a árbitros y árbitros asistentes en este apasionante torneo.
A través del uso de la inteligencia arbitral, todos los datos de una jugada relativos a la posición del balón y de hasta 29 partes del cuerpo de los futbolistas se procesan en tiempo real para determinar si una acción es sancionable o no con fuera de juego.
El árbitro asistente de vídeo (VAR) es quien recibe la información en la sala VOR y pasa a comprobarla manualmente. Acto seguido, éste informa al árbitro sobre el terreno de juego para que pueda aplicar el reglamento de la manera más rápida y precisa posible.
Todo un avance auspiciado por FIFA, que ya se utilizó en el pasado Mundial y que la Supercopa de España estrena ahora implementado por el Comité Técnico de Árbitros de la RFEF para subir un escalón más en el camino hacia la excelencia de sus competiciones.