La temporada de Willy en la NBA contrasta con su excelsa presentación en el Eurobasket. En verano, el pívot fue fundamental para el equipo de Sergio Scariolo. España alcanzó la final de la competición y derrotó a Francia en una frenética definición. El menor de los hermanos Hernangómez fue apodado como “El muro de Berlín”. Aportó en ataque. Respondió y sostuvo la defensa. Su nivel llamó la atención de los Pelicans que, con el torneo berlinés finalizado, le prometieron un espacio protagónico en la rotación.
En invierno, siete meses más tarde, la realidad del joven jugador español es adversa, por no decir preocupante. Hernangómez participó en 22 de los 47 partidos y promedia 11,8 minutos. Los de Nueva Orleans se han entregado de lleno a los destellos de Zion Williamson. El MVP del Eurobasket, en cambio, es uno más de la plantilla.
Elogios y desagravios
El futuro de Hernangómez parece alejarse de Nueva Orleans. El equipo le quiere. Es un hecho. La competencia, la falta de minutos y la ambición de seguir sumando minutos potencian ideas. Los aficionados españoles empiezan a preguntarse sobre un cambio. El jugador, desde su entorno, se encuentra en silencio. Concentrado en su deber y recalcando su ética profesional.
Hernangómez no ha tomado una decisión en caliente. Y todo apunta a que no lo hará en un corto plazo. En sí, un traspaso en el mercado de invierno (que cierra en febrero) sería la mejor alternativa para él. Un cambio de aires potenciaría al español, que necesita minutos para rendir al máximo bajo la tutela de Scariolo en las próximas convocatorias de la selección.
El pívot mantiene la calma. Es más, desde el entorno de la franquicia de Louisiana han elogiado la capacidad de resistencia del jugador y su entrega. "Está pasando por una situación muy dura, pero no le cambia. No se queja, no se enfada", dijo Trey Murphy III, alero de los Pelicans, a la agencia EFE.
Larry Lance Jr, uno de los competidores directos de Hernangómez en la posición de pívot, también se ha sumado a las voces que llenan de elogios al MVP del Eurobasket. “Simplemente hay momentos en los que no vas a jugar, yo lo he vivido. Pero si permites que eso dañe tú ética de trabajo, si traes eso cada día, los demás ven tu frustración. El hecho de que él permanezca positivo, disponible, que esté con nosotros, siempre optimista, significa mucho para el vestuario pero también para su carrera", dijo.
Willy Hernagómez es, en ese contexto, partícipe de elogios y desagravios. Sus compañeros y su entrenador se encuentran conformes con su trabajo. Él, por su parte, es conocedor de una realidad: tiene poco espacio en una plantilla competitiva y sorprendente que, paso a paso, avanza con firmeza hacia los Playoffs de la Conferencia Oeste.