Y esta pasa por realizar sesiones de recuperación en el gimnasio y dejar la raqueta en la bolsa. Nada de pasar por ninguna de las pistas este sábado para entrenar porque lo más importante, después de un mes sin parar desde el torneo de Queens, es 'desintoxicarse'. 

Así lo ha señalado su entrenador, Juan Carlos Ferrero, quien incluso le ha aconsejado que aparque junto a la raqueta su móvil y se aleje cuanto pueda de las redes sociales y de cualquier tipo de información sobre el encuentro. 

La intención es restar presión y no tensionar más a un Carlos Alcaraz que sufrió calambres por todo el cuerpo en su último enfrentamiento contra Djokovic, en la semifinal de Roland Garros. 

Será el domingo por la mañana cuando sí haga un calentamiento con raqueta en una de las pistas auxiliares del All England Tennis para soltar músculos e ir preparándose para la dura batalla que le espera a partir de las tres de la tarde contra el hasta ahora monarca de Wimbledon.