Rune ha comenzado el partido de manera impecable y ha roto el servicio del francés en el primer juego.
Giovanni Mpetshi Perricard ha mostrado inicialmente ciertas debilidades por el lado del revés, algo que Rune ha aprovechado rápidamente. Ese quiebre resultó determinante, ya que Perricard, gracias a la potencia de su saque, apenas ha concedido opciones en sus turnos de servicio.
En varias ocasiones, Perricard ha sacado por encima de los 220 y 230 kilómetros por hora, lo que ha dificultado mucho a Rune restar con eficacia.
Rune ha dispuesto de dos oportunidades de break y, por tanto, dos bolas de set cuando Perricard estaba 3-5 abajo, pero el francés ha salvado ambas con grandes saques y ha recortado distancias hasta el 4-5.
Después, Rune ha solicitado un tiempo médico para que le retiraran un insecto del ojo. Poco después, ha aprovechado su cuarta bola de set tras 40 minutos de juego.
En el segundo set, el dominio ha ido cambiando de lado, con ambos jugadores mostrando un repertorio espectacular. Sin embargo, el francés ha sido más sólido en el desempate y se ha llevado el set por 7-6, forzando así el tercer y definitivo parcial.
No obstante, Rune se ha recuperado rápidamente del golpe de perder el segundo set y no ha parecido afectado por el calor chino, ya que ha tomado ventaja de 3-0 en el tercer set.
Ese quiebre temprano le ha permitido a Rune asentarse y desplegar su mejor tenis, sin dar opción a Perricard de volver al partido, que ha durado dos horas y media.