Paula Badosa (25) tuvo que sufrir para poder superar su estreno en Roma. Se enfrentaba a Anna-Lena Friedsam (29), una rival que llegaba desde la previa. Había vencido a Moyuka Uchijima (21) y a Simona Walter (22), por lo que acumulaba bastante rodaje de cara a este gran compromiso. Y plantó cara, resistiendo hasta el tie break del tercer y definitivo set. Dos horas y 39 minutos tardó en resolverse el partido, que arrancó más tarde debido a las lluvias de la mañana.

La máxima representante del tenis español volvió a mostrar sus dos caras en el saque: firmó cuatro aces y cometió seis dobles faltas. Su oponente estuvo mucho más discreta en ambos apartados. Esa fue la única diferencia importante en lo que a estadísticas se refiere, lo que prueba que fue un choque bastante igualado y parejo. Ambas salvaron tres puntos de break antes de que Friedsam rompiera el saque -y lo perdiera justo después- en la última manga. El desempate cayó del lado de Badosa por 7-2.

Minutos antes, la germana empezó el duelo de la peor forma posible: perdió el servicio en el juego inaugural y equilibró la contienda más tarde, cuando logró establecer el 2-2. La germana estuvo a punto de ponerse en desventaja de nuevo, pero desvaneció la oportunidad de la actual número 35 del ranking WTA y se adjudicó el set inicial gracias a un sorprendente e inesperado 4-6.

Nada que ver lo que ocurrió en el segundo, ya que el 3-0 parecía dar pocas esperanzas a Anna-Lena de poder sentenciar la victoria por la vía rápida, lo cual hubiese sido una sorpresa mayúscula. No amenazó a Paula en ningún momento porque el 5-1 también parecía imposible de salvar (al final, 6-2). Y el resto es historia. Meritoria remontada para afrontar con fuerza la siguiente eliminatoria, en la cual va a subir el nivel porque jugará frente a la tunecina Ons Jabeur, la séptima del mundo. Partido muy atractivo.