Roberto Bautista (35) no tuvo rival durante buena parte del partido contra Yibing Wu (23). Era importante convencer en el debut, es decir, ganar con sensaciones positivas. Y es que ese podría ser perfectamente el resumen. Sufrió mucho más en la manga inaugural, que se resolvió vía tie break (7-4) después de más de una hora. El negativo 0-2 en el siguiente no le privó de darle la vuelta a la situación para, a la postre, conseguir un punto que le dio mucha confianza y le permitió jugar más liberado.
Había dejado escapar una fantástica oportunidad con 5-4 a favor y 40-30 para romper el saque y establecer el 1-0, pero el asiático se mostró fuerte y resistió durante varios minutos. De poco le sirvió al final, como también pensar en qué hubiera sucedido de haber podido llevárselo a su terreno. A partir de ahí, sin posibilidad alguna de sorprender a Bautista, que le infligió un doble 6-1 a modo de correctivo para conseguir plaza en el duelo frente al peruano Juan Pablo Varillas.
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Wawrinka tumba Ramos
Parecía que iba a estar mucho más igualado y resultaba difícil de pensar que se fuese a dar un 3-0 o 0-3, pero Stan Wawrinka (38) firmó una gran actuación que le permite dar un paso en el Grand Slam de Francia. Se encontró con la versión más sólida de Albert Ramos (35) al inicio, sin apenas cometer errores y haciendo bueno su servicio en todo momento, pero la experiencia del suizo tuvo un papel importante en el tie break. Dejó pasar dos bolas que le daban el punto y finalmente hizo buena la tercera (7-5).
Sufrió mucho Ramos para adjudicarse el primer juego en el siguiente set, pero el veterano tenista de casi 40 años le rompió el saque poco después y eso marcó por completo todo lo que vino, ya que el actual número 89 del ranking ATP aprovechó su servicio en todo momento (6-4). El tercero se resolvió de otra manera, con una remontada para hacer largo el choque tras vencer en el desempate: un 2-7 frente a un jugador que empezaba a dar ciertos síntomas de cansancio.
Las sensaciones de uno y otro se confirmaron en los siguientes minutos, especialmente cuando llegó un brillante 1-6 que igualaba por completo la contienda. Aun así, Wawrinka frenó la euforia en el quinto con una rotura que le permitió establecer el 3-2, hizo más grande su colchón cuando puso el 5-2, se llevó un susto después y (5-4) selló el pase a la segunda eliminatoria, en la cual se medirá a Thanasi Kokkinakis, gracias al 6-4 final y, en gran parte, a sus 14 aces.