El Abierto de Miami representa una nueva oportunidad, dijo el miércoles el italiano, que busca volver a la senda de la victoria tras caer en semifinales por 1-6, 6-3 y 6-2 ante su gran rival Carlos Alcaraz en Indian Wells.
Un reinicio no es algo que Sinner haya tenido que hacer esta campaña, después de salir disparado por la puerta grande con una racha de 16 victorias consecutivas que incluyó un primer título de Grand Slam en el Abierto de Australia.
"Nueva semana, nuevas oportunidades, veamos lo que viene", dijo Sinner en su rueda de prensa previa al torneo.
"Es sólo un partido que he perdido, en primer lugar no hay nada que pueda hacer al respecto.
"En segundo lugar, cada torneo al que vas es una nueva oportunidad y aquí hay una nueva oportunidad para mí otra vez de mostrar algo de buen tenis.
"Sabía que el punto (la primera derrota) iba a llegar.
"Estoy contento de que haya llegado en una fase bastante tardía de un torneo, eso significa bastante para mí, semifinales en un evento Masters 1000 sigue siendo un gran resultado, así que veamos lo que viene".
Los resultados anteriores indicarían que Miami es el lugar perfecto para volver a la pista.
Como jugador de 19 años en 2021, Sinner se convirtió en el primer finalista italiano en la historia del torneo, antes de llegar a la final de nuevo en 2023.
Segundo cabeza de serie por primera vez en un Masters y con Alcaraz en el otro lado del cuadro como cabeza de serie, ya se está creando un murmullo en torno a la posibilidad de una revancha entre Sinner y Alcaraz.
Tras un bye en primera ronda, Sinner abrirá su cuenta contra su compatriota italiano Andrea Vavassori, mientras que el dos veces campeón de Grand Slam Alcaraz, que busca convertirse en el primer hombre desde Roger Federer en 2017 en completar el 'Sunshine Double' después de ganar en Indian Wells, se enfrentará a Aleksandar Vukic o Roberto Carballes Baena.
Alcaraz y Sinner son la pareja de cabezas de serie más joven en un torneo Masters 1000 desde Rafael Nadal (19) y Andy Roddick (23) en Madrid en 2005, pero su rivalidad ya se ve con potencial para convertirse en una de las más entretenidas del deporte.
Ambos poseen un talento y una habilidad inmensos, pero son sus temperamentos tan diferentes los que realzan la rivalidad: el frío italiano y el fogoso español desprenden un aire a Bjorn Borg y John McEnroe.
"Me gusta (la rivalidad) y espero que acabe de empezar, es un jugador increíble", dijo Sinner.
"Fuera de la cancha no hablamos mucho porque él tiene sus cosas y yo las mías.
"Tiene muchas emociones, muestra un espíritu de lucha realmente bueno.
"Yo no muestro tantas emociones en la cancha, pero funciona igual de bien por mi parte. Siempre estoy muy contento cuando me enfrento a él".