Después de ganar el trofeo de Montecarlo la semana pasada, Alcaraz buscaba su tercer título en cuatro años en Barcelona, pero la racha de nueve victorias en tierra batida del jugador de 21 años se vio truncada por Holger Rune, que selló una victoria por 7-6 y 6-2 el domingo.
Alcaraz se adelantó por 2-1 en el segundo set, pero tuvo que pedir permiso a los médicos para tratar su problema en la pierna y fue incapaz de dar la vuelta al partido, dejando a algunos aficionados preocupados por su estado físico de cara al Abierto de Madrid, que comienza el miércoles.
"Es lo que pasa cuando juegas tantos partidos y tienes tan pocos días para descansar. Es muy exigente y tienes que dar el 100% cada día", dijo Alcaraz.
"Haber jugado un torneo como Montecarlo y llegar a Barcelona con pocos días de adaptación es muy duro".
Alcaraz dijo que recibió palabras amables de Nadal, retirado 22 veces campeón de Grand Slam, el último hombre en ganar Montecarlo y Barcelona en semanas consecutivas en 2018.
"Me postro a los pies de Rafa por lo que hizo semana tras semana. Hay que respetarlo", dijo Alcaraz sobre el 14 veces ganador del Abierto de Francia.
"Admiramos a Rafa por lo que ha hecho en este swing. Ganarlo todo consecutivamente es imposible. Una vez que lo vives, aprecias mucho más lo que ha hecho Rafa y lo difícil que es estar al 100% física y mentalmente semana tras semana."
Alcaraz, que defenderá su título de Roland Garros cuando comience el Grand Slam el 25 de mayo, se mostró confiado en poder sacudirse su última lesión.
"Tendremos dos días de descanso... Hablaré con mi equipo, haremos algunas pruebas, pero confío en que no me afecte en Madrid".