El único representante español en la modalidad individual, incluyendo tanto a hombres como a mujeres, tenía un exigente reto por delante en la capital francesa. Pese a terminar con no muy buenas sensaciones ante Damir Džumhur, el número dos del mundo tiene crédito de sobra y es uno de los grandes favoritos a conquistar el título. Jannik Sinner, Novak Djokovic o Alexander Zverev también están en ese privilegiado grupo.
El murciano debutó con una convincente victoria ante el italiano Giulio Zeppieri, que apenas le puso en aprietos. Luego, ya en la siguiente ronda, Fabian Marozsan fue capaz de incluso igualar el marcador global. El húngaro, sin embargo, acabó sucumbiendo tras dos parciales sin demasiada historia (1-6 y 2-6).
Shelton, por su parte, tuvo que afrontar un largo encuentro ante Sonego -más de tres horas y media-. Eso sí, hay que destacar que no tuvo que saltar a pista para jugar contra Hugo Gaston debido a la retirada de este último. Otro italiano, Matteo Gigante, sufrió también las embestidas del tenista norteamericano.
Duelo de tú a tú
Hubo que esperar al séptimo juego para que se diera la primera y única oportunidad de rotura, a favor de un Alcaraz que no pudo concretarla. La igualdad fue máxima hasta el tie-break, en el que el 13º del mundo llegó a dominar por 4-1 y tener tres bolas de set antes de ser superado por un jugador que aspira a marcar una época (6-7/8-10).
El inicio de la siguiente manga fue radicalmente opuesto a lo visto anteriormente: el de El Palmar tuvo que salvar hasta seis opciones de rotura en el juego inaugural, que duró 17 minutos. De forma inmediata, Ben respondió con solvencia y autoridad para instaurar las tablas y reivindicar que ni mucho menos se iba a dar por vencido.
La dinámica del partido continuó con una igualdad máxima hasta el octavo juego del segundo set. Alcaraz domostró su poderío al resto rozando la rotura en blanco. Shelton consiguió rascar un punto, pero Carlitos no desaprovechó su segunda bola de break para encaminar el segundo set.
Dicho y hecho. El español se puso manos a la obra y consiguió doblegar al estadounidense con un juego en blanco. Los intentos de Shelton no fueron suficientes y los cuartos de final estaban más cerca después de haber cerrado el 2-0.
Shelton se rebela
Ben se apoyó en su saque para ganar confianza y oxígeno. Mientras que sus servicios eran cortos, a Alcaraz le costaba sangre, sudor y lágrimas concretar los suyos. En el cuarto juego saltó la sorpresa, llegó el break en contra del favorito y el norteamericano se vio por primera vez dos por delante de su rival.
Sin embargo, la alegría no le duró demasiado, ya que recibió de vuelta la bofetada en el siguiente envite. Alcaraz empató el partido sin titubear y con un juego en blanco que disipó las sensación de debilidad respecto a su saque en la tercera manga.
En el octavo juego del tercer set, el vigente campeón del torneo olió la sangre. Alcaraz apretó a sabiendas de que era el momento idoneo para superar el saque de su rival y depender de él mismo para conseguir el billete hacia los cuartos, pero no le salió bien.
A pesar de las similitudes con el primero del partido, no duró 17 minutos y tampoco tuvo el mismo vencedor. Shelton se hizo con el triunfo para seguir con vida y agarrarse a sus posibilidades, 5-4.
No fueron los mejores cinco servicios del murciano. El de Atlanta se armó de confianza y cerró su primer set para avivar las dudas del número dos del mundo.
Carlitos certifica su pase a cuartos
Alcaraz concedió su segundo set en dos partidos, era el momento de ponerse serio. Carlos dio algo de margen al norteamericano en el inicio de la cuarta manga, pero el tercer juego acabó en break a su favor y la victoria estaba en manos de su saque.
El partido tenía su recorrido marcado, sólo había que seguir los carriles. Shelton intentó descarrilar el tren, pero Alcaraz ya había visualizado los cuartos y activado la velocidad de crucero.
No fue suficiente con una sola bola de partido, de hecho el cuarto set llegó al 10º juego, pero no pasó de ahí. Alcaraz solventó la papeleta con un juego igualado y a la segunda bola de partido. Su rival en cuartos será Tommy Paul, que derrotó a Popyrin en octavos.