Al comienzo del Súper Sábado había cuatro equipos que aún podían ganar el título, pero la victoria de Irlanda sobre Italia colocó a los irlandeses temporalmente en lo más alto de la tabla y acabó con la posibilidad de Escocia de llegar a lo más alto independientemente de su resultado contra Francia en París.
Sin embargo, con la goleada de 10 ensayos de Inglaterra a sus antiguos rivales en Cardiff, los ingleses se colocaron en cabeza y pusieron fin al intento de Irlanda de lograr un tercer título consecutivo. Inglaterra tiene ahora 20 puntos y necesita que Escocia gane a Francia (16 puntos) para que el trofeo acabe en Londres.
Para Francia, cualquier tipo de victoria será suficiente para ganar su primer Campeonato de las Seis Naciones desde 2021, pero todo lo que no sea una victoria verá el nombre de Inglaterra en el trofeo por primera vez desde 2020.
Inglaterra se mantiene en la lucha por el título del Seis Naciones tras superar a Gales
Inglaterra tenía el partido prácticamente resuelto en el descanso después de anotar cinco ensayos para liderar 33-7 en el descanso.
El capitán inglés , Maro Itoje, abrió el marcador en el minuto 3, y Tom Roebuck, Tommy Freeman, Chandler Cunningham-South y Will Stuart siguieron sus pasos.
El medio scrum Alex Mitchell, el debutante de 20 años Henry Pollock, con dos de los suyos, Joe Heyes y Cunningham-South volvieron a sumar otros cinco ensayos en la segunda parte.
Ello permitió a Inglaterra superar su anterior récord de victorias en el Seis Naciones sobre Gales, de 40 puntos, establecido durante el triunfo por 50-10 en Twickenham en 2006.
El esfuerzo de Freeman significó que igualó el récord de 2001 del ala francés Philippe Bernat-Salles de marcar un ensayo en cada ronda del Seis Naciones.
Para Gales, su 17ª derrota consecutiva representó un récord no deseado para un país de primer nivel en la era profesional. Su 11ª derrota consecutiva en el campeonato significaba que habían terminado con dos cucharas de madera seguidas por primera vez en la historia de una orgullosa nación de rugby.
No era la forma en la que el seleccionador interino de Gales, Matt Sherratt, hubiera querido cerrar su periodo de tres partidos como interino, después de hacerse cargo del equipo a mitad del torneo, tras el final de la segunda e infructuosa etapa de Warren Gatland al frente del equipo.
Itoje había hablado en los prolegómenos sobre la necesidad de "empezar bien" y "llevar realmente el partido a Gales". El delantero fue fiel a su palabra bajo el techo cerrado de un estridente Principality Stadium.
El zaguero galés Blair Murray se adelantó en el marcador, pero su ensayo fue anulado por fuera de juego del medio scrum Tomos Williams.
Pero no había forma de parar a la poderosa Inglaterra, y Roebuck marcó su primer ensayo como titular con un ensayo en el minuto 10, cuando el ala se deshizo del diminuto Murray para entrar por la esquina derecha. Fin Smith añadió la difícil conversión e Inglaterra se puso 14-0 por delante.
Murray, sin embargo, estuvo a punto de marcar un ensayo después de adelantarse en el marcador, pero el hooker inglés Luke Cowan-Dickie lo derribó con un brillante tap-tackle.
Gales recortó distancias en el minuto 31 cuando, tras un line-out ofensivo tras un lanzamiento, el pase de Williams envió al centro Ben Thomas a un ensayo convertido por Gareth Anscombe.
Sólo tres minutos más tarde, Inglaterra volvió a distanciarse. La patada de despeje del ala Anscombe fue rechazada e Inglaterra recuperó el balón para Fin Smith antes de que Freeman se adelantara.
Inglaterra, en posiblemente los 40 minutos más hábiles del mandato del seleccionador Steve Borthwick, aún tuvo tiempo de anotar dos ensayos más antes del descanso. Gales fue una vez más superado en el breakdown con Cunningham-South, en sustitución del lesionado Ollie Chessum, dos veces involucrado antes de que terminara para el punto de bonificación de cuatro anotaciones.
Inglaterra, con el flanker Ben Curry sobresaliente, volvió a cruzar la línea de Gales cuando el puntal Will Stuart celebró su 50º partido como internacional con sólo su tercer ensayo. Fin Smith falló entonces su primera conversión en cinco intentos, la única mancha en una primera parte dominada por Inglaterra.
Gales se recuperó al comienzo de la segunda parte, pero fue Inglaterra la que marcó a continuación, cuando Mitchell, aprovechando un balón suelto, anotó el sexto ensayo de los visitantes.
Pollock y Heyes consolidaron el dominio inglés antes de que Thomas anotara su segundo ensayo del partido, aunque Cunningham-South tuvo la última palabra.
Sheehan, protagonista en la victoria de Irlanda sobre Italia
A primera hora del día, Dan Sheehan anotó un triplete de ensayos y los irlandeses consiguieron el punto extra que necesitaban en el día en que Peter O'Mahony y Conor Murray se despidieron del rugby internacional ante un ejército de seguidores.
Irlanda tuvo que remontar un duro choque ante la batalladora Italia, que jugó gran parte del partido con menos hombres sobre el campo debido a las tarjetas amarillas de Michele Lamaro y Giacomo Nicotera, y a la expulsión de Ross Vintcent por un placaje imprudente sobre Hugo Keenan, el otro goleador irlandés.
Italia volvió a pecar de la indisciplina que tan a menudo le ha costado en el Seis Naciones y que podría dejarla con la cuchara de madera en la mano, a pesar de haber conseguido un punto bonus defensivo.
El equipo de Gonzalo Quesada se mantiene quinto con cinco puntos, dos puntos por encima del colista Gales, que evitará terminar último con una victoria sobre Inglaterra o incluso si no gana y consigue suficientes puntos de bonificación, manteniendo su superior diferencia de puntos sobre los italianos.
"Obviamente estamos decepcionados al final del partido porque fue un día en el que 15 contra 15 fuimos durante largos periodos el mejor equipo", dijo Quesada a la prensa.
"No estuvimos tan lejos de conseguir una victoria que habría sido increíble, pero al mismo tiempo hay muchas cosas de las que podemos estar orgullosos".
Los anfitriones fueron superiores a la mediocre Irlanda en el primer periodo, pero se fueron al descanso por detrás en el marcador, en gran parte debido a que Lamaro recibió una tarjeta amarilla y regaló un scrum que llevó a Sheehan a poner por delante al equipo visitante con su segundo ensayo del partido.
Hasta ese momento, Italia iba ganando gracias a la transformación de Monty Ioane y a un penal de Tommaso Allan, pero la terrible entrada de Vintcent poco después del descanso provocó el clásico tambaleo de los italianos, que se mantuvieron en el partido gracias a que Irlanda no transformó tres de sus cuatro ensayos.
Finlay Bealham, James Lowe y Keenan también vieron como el TMO anulaba los ensayos de Irlanda en un partido repleto de incidentes.
El suplente Stephen Varney se aseguró de que fuera un final tenso cuando anotó para convertir después de que Ange Capuozzo persiguiera una patada larga y forzara un error de manejo irlandés, pero Irlanda aguantó para ganar.