Garbiñe Muguruza continúa sin saber lo que es saborear un triunfo en 2023. De hecho, con la derrota que cosechó este lunes ante la joven de 18 años Linda Noskova, ya acumula seis consecutivas y no sale victoriosa de un encuentro desde el pasado 21 de septiembre.
Noskova, campeona de Roland Garros júnior en 2021 y en el puesto 56 del ranking, hizo valer su mejor clasificación (la hispanovenezolana ya es la número 82) para no dar opción a su rival, inmersa en el peor momento de su carrera, y ganar con facilidad por 6-1 y 6-4 en una hora y 14 minutos.
Ya desde el comienzo del primer set se veía que tampoco iba a ser el día de Muguruza, invitada por la organización del torneo. Perdió su saque en dos ocasiones y no tuvo ninguna bola de break a su favor, por lo que en 25 minutos la checa, procedente de la fase previa, ya tenía la mitad del trabajo hecho sin demasiado esfuerzo.
Reaccionó por fin Muguruza en la segunda manga, en la que se puso con 3-0, pero fue un espejismo porque, como ya le pasó en Melbourne contra Elise Mertens, no supo tener contundencia estando arriba en el marcador, no estuvo acertada al resto (tan solo pudo ejecutar una de las siete bolas de rotura de las que dispuso) y perdió seis de los siete juegos siguientes para despedirse en primera ronda del torneo francés.
La misma suerte que Garbiñe, aunque mostrando una imagen completamente diferente, corrió Marina Bassols, que había conseguido acceder al cuatro principal de Lyon tras ganar sus dos encuentros de la fase previa a Gracheva y a la veterana Errani.
La gerundense, en el puesto 124 de la clasificación mundial, plantó cara durante dos horas y cuarto hasta caer por 4-6, 6-1 y 6-2 ante la quinta cabeza de serie y número 43 del ranking Anastasia Potapova. Tras solventar su primer saque del encuentro a duras penas, Bassols sorprendió a su oponente con su agresividad al resto para, tras una hora de pelea, llevarse el primer set.
Pero pagó muy caro el esfuerzo realizado la catalana, que perdió sus tres juegos al servicio en la segunda manga y tres de cuatro en el parcial definitivo (de hecho, ganó más al resto que con su propio saque). Esto le puso en bandeja la victoria a la tenista rusa y redujo la representación española en el cuadro del torneo galo a la mitad a la espera de saber qué tal se les de su debut tanto a Rebeka Masarova, que juega el miércoles, como a Nuria Párrizas, que lo hará mañana martes.