Luka Modric no pudo ocultar su dolor tras caer en semifinales de la Copa del Mundo ante la Albiceleste por 3-0, lo que le privó de su segunda final consecutiva. "Estoy muy jodido y triste por haber perdido el partido. Hay que recuperarse e intentar ganar el partido por el tercer puesto. Estamos tristes porque esperábamos jugar una nueva final. No sucedió. Hay que felicitar a Argentina y ya está", comentó el madridista en zona mixta, volviendo a dar una muestra de deportividad para reconocer el mérito de sus adversarios.

Especialmente fue cariñoso con un Leo Messi a quien que no tuvo ningún tipo de reparo en elogiar: "Ojalá que gane este Mundial. Es el mejor jugador de la historia y se lo merece. Está haciendo un torneo muy bueno, está mostrando su calidad y grandeza en cada partido".

Al ser preguntado sobre si el del sábado por el tercer y cuarto puesto (ante el perdedor del Francia-Marruecos) será su último encuentro como internacional con la selección croata, el de Zadar no consideró que fuera el momento más oportuno para pensar en su futuro: "No lo sé, ya veremos. No es el momento de hablar de esto. Hay un bronce en juego y tenemos que ir preparados”.

Orsato, un viejo enemigo

Su tristeza y deportividad se convirtieron en enfado y malestar cuando le recordaron la actuación del árbitro italiano Daniele Orsato, que señaló un discutido penalti en la primera mitad que el propio Messi aprovechó para anotar el primer gol del combinado sudamericano, que encarrilló de este modo el choque.

“Fue un momento clave del partido. No nos da un córner a favor y luego sí pita el penalti, que para mí no lo fue porque Julián Álvarez tira, nuestro portero le sale al frente y se choca con él. No me puedo creer que haya pitado ese penalti. Eso cambió el partido, pero así son las cosas”, explicó Modric, que no recordó con mucho cariño al transalpino: “Nunca hablo de árbitros, pero hoy (martes) es imposible no hacerlo. Es uno de los peores que conozco. No solo por el partido de hoy. Me ha pitado muchas veces y nunca tengo buen recuerdo de él. Es un desastre”. 

Cabe recordar que Orsato ha arbitrado al Real Madrid en siete ocasiones en Champions League, la última hace menos de dos meses en la que supuso la primera derrota blanca de la temporada en el 3-2 del RB Leipzig. En esos siete encuentros, los merengues ganaron tres y perdieron cuatro, con lo que el balance es más que negativo. El italiano, además, ha dirigido tres partidos de la selección de Croacia desde que Modric comenzó a ser convocado con, de nuevo, más derrotas (dos) que victorias (una), por lo que no es de extrañar que al Balón de Oro de 2018 no le guste demasiado coincidir con él.