Parecía que Isco había encontrado un nuevo destino en el que intentar desencallar una carrera que frenó en seco en los últimos años. El malagueño estaba en la capital alemana este martes por la mañana, donde incluso había pasado el reconocimiento médico en el hospital universitario de La Charité con el Unión Berlín, segundo clasificado de la Bundesliga por detrás del Bayern Múnich. Pero en el último segundo y cuando parecía que iba a firmar hasta 2024, todo se fue al traste.
Así lo comunicó Oliver Ruhnert, director deportivo del equipo germano, en unas palabras un tanto crípticas publicadas en la cuenta de Twitter de la entidad: "Nos habría gustado ver a Isco con nosotros, pero tenemos nuestros límites. Contrariamente a los acuerdos anteriores, estos fueron superados hoy, razón por la cual no se realizó el traspaso".
Queda por determinar cuáles son esos límites y en qué manera fueron sobrepasados, aunque se apunta a unas pretensiones económicas por parte del futbolista demasiado elevadas. En declaraciones al conocido medio alemán Bild, la empresa que representa a Isco, Gestifute (fundada por el célebre representante portugués Jorge Mendes), culpó al Unión Berlín de la ruptura de las negociaciones: "En el transcurso de las conversaciones, tuvimos que darnos cuenta de que nuestro socio negociador ya no estaba dispuesto a moverse dentro del marco originalmente discutido".
La misma publicación informó de que Isco, inmediatamente después de su frustrado fichaje, regresó al aeropuerto de Berlín, desde donde saldrá esta misma noche rumbo a España en un avión privado.
El peor año de su carrera
Sea por el motivo que sea, el de Arroyo de la Miel continúa con su temporada para olvidar. Tras no renovar su contrato con el Real Madrid el pasado verano tras nueve temporadas en el club blanco, firmó gratis por el Sevilla, donde no cuajó y, solo cuatro meses y 19 partidos después de su llegada, abandonó la disciplina hispalense el pasado mes de diciembre.
A sus 30 años, el exinternacional con la selección continúa a la deriva y con pocos signos de mejora en su carrera, no en vano incluso se ha llegado a especular con una hipotética vuelta al Málaga en la categoría de plata del fútbol español, aunque es una opción imposible por las normas económicas de LaLiga.