"Cómo están los internacionales, hay que preguntarle a los seleccionadores. Los jugadores a final de año, entre los cuatro parones de selecciones, entre todas las convocatorias, tendrán 48 días de ausencia, más la Copa de África, el Mundial y las vacaciones; prácticamente, les pagan seis meses para estar en otro sitio. Creo que hay que revisar completamente el calendario". Así ha rajado Maurizio Sarri, entrenador de la Lazio, en la conferencia previa al desafío contra el Sassuolo, subrayando los problemas que causa el parón FIFA.
"Estos chicos están haciendo un tour de force. Dele-Bashiru, por ejemplo, llegó el jueves por la tarde tras un vuelo de 16 horas, no le hicimos entrenar porque habría sido destructivo. Dia es uno de los que faltan desde hace 12 días, Rovella y Zaccagni vinieron lesionados de la selección, no sabemos si Rovella estará disponible o no", ha explicado.
"Esto forma parte de las convocatorias con la selección, es inevitable porque los tiempos de recuperación se respetan menos que en el club. Probablemente se subestimó la lesión de Rovella, si estuvieran seguros de no poder utilizarlo lo habrían recuperado".
"El Sassuolo un equipo fuerte, su ataque tiene pocos".
Luego, hablando del próximo rival, el técnico admite que el Sassuolo es un "equipo fuerte y ha tenido un inicio difícil desde el punto de vista de los resultados, su ataque lo tienen pocos. Es un equipo muy bueno que en mi opinión no tendrá nada que ver con la baja clasificación, debemos tener la madurez para entender al adversario y comprender que será difícil porque la superficialidad se paga. Nuestro tipo de planteamiento será fundamental", afirmó.
"Si la actitud mental es la del primero no tenemos ninguna posibilidad, si es la del último sí", concluyó Sarri.