Se trata de Mario Gila, de 23 años, por el que la Lazio pagó en el verano de 2022 seis millones de euros a cambio de la mitad de sus derechos federativos. Una operación similar a la que suele realizar el Real Madrid con sus futbolistas más prometedores.
Y aunque le costó brillar, el central barcelonés se ido ganando un sitio en el cuadro romano, especialmente este curso, hasta tal punto que está muy bien considerado en Italia, pero también en su club de origen.
Alejandro Camaño, su agente, no escatima elogios. "Puede ser uno de los mejores centrales del mundo, es muy joven, tiene una gran personalidad y es muy trabajador", ha comentado en Sportitalia sobre el internacional sub21.
Y ha añadido que "está absolutamente preparado para hacer felices a los aficionados del Lazio. Luego, jugará donde quiera, porque está preparado para ser el número uno".
Tras ese rodaje y buen hacer, en el Real Madrid lo siguen teniendo en cuenta para su futuro. Cuentan con contrato en vigor para la próxima campaña con Rüdiger, Militao y Alaba, pero estos dos últimos han sufrido sendas lesiones graves.