"¡No escuchéis las fake news. Kanté ya es jugador del Ittihad!", tuiteó el club de Yeda con una imagen del futbolista con la camiseta a rayas amarillas y negras, seguida de un vídeo de Karim Benzema dando la bienvenida a su nuevo compañero.
"Estoy feliz de volver a jugar contigo. Y por supuesto, en el mejor equipo de Arabia Saudí. Nos vemos pronto en Jeddah", dijo el Balón de Oro, que firmó también en junio un contrato de tres temporadas con el Al-Ittihad.
"Estoy muy emocionado de jugar con los Tigres, delante de los aficionados del Al-Jawhara (la Joya)", el estadio del club en Yeda, dijo Kanté en el mismo vídeo. "Bienvenido a nuestro nuevo tigre Kanté", escribió el presidente del club, Anmar Al-Hailee, también en Twitter.
Kanté, de 32 años, firmó a principios de junio un precontrato de tres años con el Al-Ittihad. Sin embargo, el club saudí había condicionado su contratación definitiva a los exámenes médicos, ya que el jugador ha sufrido múltiples lesiones esta temporada. "El contrato se finalizó el martes 20 de junio, después de que Kanté se sometiera a exámenes médicos en un centro médico especializado de Dubai", anunció el club saudí en Twitter.
Generoso y discreto
"La llegada de Kanté al Al-Ittihad está considerada como una de las contrataciones más prestigiosas y significativas de la historia del club", señaló la entidad , que deseó muchos éxitos al francés. Natural de Rueil-Malmaison, cerca de París, estuvo de baja más de seis meses la temporada pasada por una lesión en los isquiotibiales y los aductores.
Con 53 internacionalidades con Francia, Kanté sigue siendo una figura clave de los Bleus, aunque no pudo participar en el pasado Mundial de Catar por sus problemas de salud. También le ofreció un nuevo contrato el Chelsea, al que se unió en 2016 y donde el centrocampista de 1,68 metros ha estado siempre presente, sobre todo con un recital en 2021 para llevar el trofeo de la Liga de Campeones al club inglés.
Querido y respetado por todos -compañeros, aficionados y rivales- por su amabilidad y modestia, el centrocampista francés se ha forjado una reputación de jugador generoso y discreto, cuyas cualidades como futbolista se corresponden a la perfección con su personalidad fuera del terreno de juego.
Su carrera despegó a los 19 años, cuando fichó por el Boulogne-sur-Mer. Kanté ascendió rápidamente, hasta llegar al primer equipo, en la National (tercera división). Tras un paso por el Caen (2013-2015), puso rumbo a Inglaterra y a la gloria en el Leicester, con el que se proclamó campeón en 2016, después se fue al Chelsea y ahora jugará en el Al-Ittihad.
N'Golo Kanté se reencuentra con Karim Benzema, de 35 años, que a principios de junio fue recibido en Yeda por decenas de miles de seguidores del Al-Ittihad tras 14 temporadas en el Real Madrid. Esto se produjo pocos meses después de la estruendosa llegada de Cristiano Ronaldo al país, que lanzó una gran ofensiva hacia varias estrellas del fútbol que jugaban en Europa, entre ellas el argentino Lionel Messi, que finalmente se decantó por el Inter de Miami, en Estados Unidos.
El reino, criticado por sus violaciones de los derechos humanos, está decidido a utilizar el fútbol para mejorar su imagen internacional y dispone de una gran capacidad económica para satisfacer sus ambiciones. Los traspasos de estrellas del fútbol mundial dan fe de la magnitud de las ambiciones deportivas de la monarquía, que estudia presentar su candidatura para albergar el Mundial de 2030 y los Juegos Olímpicos.
Arabia Saudí organizará también la Copa de Asia de fútbol masculino de 2027, los Juegos Asiáticos de 2034 e incluso los Juegos Asiáticos de Invierno de 2029, cuya adjudicación, juzgada por algunos como una aberración ecológica, fue acogida con estupor por el mundo del deporte.