La oferta, según Sky, ha sido de 218 millones de libras, lo que supone, al cambio actual, 253.720.000 euros. El mercado saudí cierra sus puertas, para alivio de los clubs europeos, este jueves 7 de septiembre y el Fondo Soberano ha intentado una última demostración de poderío económico de enorme magnitud. Al Ittihad, el equipo de Benzema, iba a ser su destino. El interés saudí por el egipcio es muy grande y durante el verano han ido subiendo la cantidad ofrecida hasta llegar a esos 253 millones que ha rechazado el Liverpool. El poder de atracción de Salah como estrella deportiva del máximo nivel en el mundo árabe les ha llevado a intentar un jaque mate que no les ha salido como esperaban. 

Tanto el club de Merseyside como el jugador parecían tener claro desde hace semanas que no se iba a marchar de Inglaterra por mucho dinero que hubiera encima de la mesa. Según publicó Daily Mail, el futbolista ya había dicho en el vestuario en alguna ocasión que no se movería de Anfield en ningún caso. Klopp, en nombre del club, ha mantenido la misma línea y compañeros como el húngaro Szoboszlai dijo públicamente, tras el partido contra el Aston Villa, que la decisión estaba tomada: “Salah quiere quedarse con nosotros. Le necesitamos en el equipo”. 

Ahora, con las ventanas cerradas, es tiempo de competición. Cuando se vuelva a abrir el mercado, Arabia Saudí volverá a hacer temblar al fútbol europeo. No van a parar y la costumbre de pescar en el viejo continente irá subiendo de nivel.