El capitán de los Gunners, Odegaard, se mostró desolado por la capitulación de su equipo en la segunda parte, en la que Julio Enciso, Deniz Undav y Pervis Estupiñán marcaron ante el atónito público del Emirates Stadium.
El City ganará el título por quinta vez en seis temporadas, y por tercer año consecutivo, si el Arsenal pierde el sábado en Nottingham Forest.
Incluso si el segundo clasificado, el equipo de Mikel Arteta, vence al Forest, el título seguirá siendo para el City si los líderes ganan en casa al Chelsea el 21 de mayo o suman tres puntos en sus otros dos partidos, en Brighton y Brentford.
A la pregunta de si la carrera por el título ha terminado, Odegaard respondió: "Sí, eso parece. Ahora va a ser muy difícil, para ser sinceros. Es difícil de aceptar".
"No es una buena sensación en este momento. La forma en que hemos jugado, sobre todo en la segunda parte, no sé qué ha pasado, la verdad. Parece que ya no hay esperanza".
Tras liderar la tabla durante largos periodos, el Arsenal ha echado por tierra su intento de ganar su primer título desde 2004.
Una racha de sólo dos victorias en sus siete últimos partidos ha resultado decisiva, ya que el City llega a la meta con una larga racha de triunfos.
A pesar del descalabro final, el centrocampista noruego Odegaard insistió en que sus jóvenes compañeros habían sido lo bastante fuertes mentalmente para la presión de la lucha por el título.
"Queríamos venir aquí y seguir como en los dos últimos partidos, conseguir un buen resultado y seguir presionando. Es una gran decepción", afirmó.
"En la primera parte hicimos muchas cosas buenas y tuvimos momentos para crear grandes ocasiones, pero en la segunda les dimos más y más empuje".
"No creo que la mentalidad fuera un problema. Entramos bien en el partido, pero en el partido fue otra historia y tenemos que aceptarlo y aprender de ello".