Gracias a la ventaja que tenía antes del partido, el Liverpool podía permitirse un tropiezo en su lucha por el título, pero los tres puntos eran el objetivo obvio contra el Wolves.
Los Reds empezaron con buen pie en busca de esos puntos, con una gran ocasión de gol a los 10 minutos, pero Diogo Jota, ex jugador del Wolves, sólo pudo rematar de volea fuera por poco tras una combinación entre Trent Alexander-Arnold y Andy Robertson.
Los Reds no tuvieron que esperar demasiado para adelantarse, aunque en circunstancias fortuitas, ya que un mal despeje de Toti Gomes encontró el camino de Luis Díaz, quien remachó el balón con la media vuelta para dar la ventaja al Liverpool.
Díaz estaba demostrando ser la espina clavada en el costado de los Wolves en Anfield, poniendo en aprietos a Jota en el área, pero éste se vio frustrado por un sensacional bloqueo en el último segundo de Emmanuel Agbadou.
Los ataques del Liverpool se sucedieron a lo largo de la primera parte, y sólo parecía cuestión de tiempo que se pusieran dos goles por delante. Y así fue, poco antes del descanso, con un gol de Mo Salah desde el punto penal, después de que José Sá derribara al influyente Díaz en el área.
Matheus Cunha al menos estuvo a punto de responder, y aunque su lanzamiento de falta pareció prometedor en un momento dado, su disparo se marchó desviado por centímetros.
El Wolves dispuso de una ocasión inmejorable para recortar distancias, cuando el mariscal Munetsi se internó en la portería, pero Alisson le negó el gol.

Los visitantes también estuvieron a punto de recibir una dura lección de fútbol cuando Alexander-Arnold asistió a Salah y éste marcó, pero el fuera de juego evitó que los Wolves se sonrojaran. Estaba siendo una tarde ajetreada para los árbitros, que volvieron a ser el centro de la polémica justo antes de la hora de juego.
Simon Hooper señaló el punto de penalti cuando un giro salvaje de Agbadou bastó para que Jota se fuera al suelo en el área, pero tras ser llamado al monitor del terreno de juego revocó su decisión inicial.
El Wolves también aprovechó esa oportunidad y recortó distancias con un sensacional remate de Cunha ante la Kop.
El equipo de Arne Slot realizó una segunda parte atípicamente pobre, en la que nunca se sintió cómodo con su ventaja de un gol, pero se aferró a ella para asegurarse tres puntos importantísimos en la carrera por el título, que le permiten recuperar su ventaja de siete puntos.
La derrota del Wolves era de esperar, y le deja justo por encima de la zona de descenso.
Jugador Flashscore del partido: Luis Díaz (Liverpool)