Marc Guehi ha sido el principal objetivo defensivo del club durante gran parte de este mercado, ya que lo consideran el compañero ideal para Virgil van Dijk y el reemplazo a largo plazo de Ibrahima Konate.
Arne Slot y su equipo de reclutamiento creen que la combinación de atletismo, agresividad y serenidad con el balón de Guehi encaja perfectamente con el nuevo enfoque táctico que se está implementando en Anfield.
Hasta ahora, el Liverpool había intentado negociar con dureza. Pensaban que la postura de Crystal Palace se debilitaría a medida que el contrato de Guehi se acercara a su fin y ante la amenaza de perderlo gratis en 2026.
Pero el Palace se ha mantenido firme en todo momento, valorando al internacional inglés en torno a los 40 millones de libras y, si logran su objetivo, incluso podrían pedir hasta 45 millones.
El Liverpool quería fijar el precio en 30 millones, pero empieza a asumir que será inevitable superar esa cifra, aunque cada vez creen más que pagar ese extra tiene más sentido que esperar.
Dejar que la negociación se alargue hasta 2026 solo aumentaría la competencia por Guehi, ya que otros grandes clubes europeos están interesados, mientras que los propios problemas defensivos del equipo esta temporada han hecho más urgente la necesidad de refuerzos.
Y Guehi no es el único objetivo de alto coste, por supuesto.
El Liverpool también está planeando el fichaje millonario de Alexander Isak, con una oferta formal de unos 130 millones de libras en estudio.
El Newcastle, sin embargo, lo valora más cerca de los 150 millones, y habrá que ver si finalmente se ven obligados a aceptar una oferta inferior por el delantero.
Si el Liverpool avanza en ambas operaciones, el gasto total superaría ampliamente lo invertido este verano con las llegadas de Florian Wirtz, Hugo Ekitike, Jeremie Frimpong, Milos Kerkez y Giovanni Leoni, lo que supondría una de las reconstrucciones más ambiciosas y costosas de la historia.
