El Special One vuelve a estar libre en el mercado. Pocos días después de fallar el acceso a la Liga de Campeones, con una derrota global de 1-0 frente al Benfica, Mourinho fue despedido sin grandes formalidades por el club turco.
Conocido por no permanecer demasiado tiempo en ningún proyecto, Mourinho ha construido su carrera en momentos de gran éxito, aunque estos ya no se produzcan con la frecuencia de otros tiempos. Para muchos, el hombre que lo ha conquistado prácticamente todo en el fútbol empieza a parecer desfasado de la nueva realidad del juego.
Mourinho, sin embargo, no comparte esa visión. Con una carrera marcada por títulos y polémicas, difícilmente aceptará quedarse apartado por mucho tiempo, incluso habiendo acumulado ya cerca de 104 millones de euros en indemnizaciones a lo largo de sus despidos.
¿Qué sigue, entonces, para uno de los entrenadores más destacados de la historia del fútbol moderno?
¿Un regreso a la Premier League?
Las vinculaciones a un posible regreso de José Mourinho al fútbol inglés son inevitables y ya han empezado a ganar fuerza.
En el West Ham, Graham Potter sigue bajo enorme presión, aunque la victoria por 3-0 frente al Nottingham Forest alivió momentáneamente el ambiente. El club de Londres se reforzó en los últimos días del mercado, fichando a los centrocampistas Mateus Fernandes y Soungoutou Magassa, pero el futuro del entrenador permanece abierto.
Hablando del Nottingham Forest, The Athletic reveló recientemente un importante desacuerdo entre el técnico Nuno Espírito Santo y el nuevo Global Head of Football, Edu. Con el puesto de Nuno en riesgo, Mourinho surge como un nombre capaz de llevar al club a otro nivel, aunque, dada la relación atribulada con el propietario Evangelos Marinakis, la estabilidad difícilmente sería duradera.
Sin embargo, el escenario más plausible podría estar en el Wolverhampton. Tras una temporada en la que consiguió revertir la mala racha del equipo, el actual entrenador, Vítor Pereira, se encuentra ahora en el último lugar de la Premier League, con tres derrotas en tres partidos y solo dos goles marcados.
Dada la fuerte vinculación del club con Jorge Mendes, agente de Mourinho, no sería sorprendente ver al portugués asumir pronto el mando de los Wolves.
¿Es el momento de pasar a dirigir una selección?
Desde hace algún tiempo se percibe que el ciclo de José Mourinho como entrenador de clubes de élite se está agotando. El portugués ya no transmite la misma aura de otros tiempos y parece haber perdido la capacidad de relacionarse con los jugadores al nivel que le permitió triunfar en gigantes como el Chelsea, el Real Madrid o el Inter de Milán.
El mando de una selección nacional ha sido señalado frecuentemente como el siguiente paso en su carrera, y el propio Mourinho ya ha admitido estar abierto a ese cambio en varias ocasiones.
En una entrevista reciente con Sporty Net, el técnico fue claro: “Estoy fuera de Portugal desde 2004 y creo que mi país no aceptaría que entrenara a una selección que no fuera la mía. Mi destino, en términos de selecciones, es disputar un Mundial con la selección portuguesa. Nunca he pensado en entrenar a Brasil. Mi primera experiencia tiene que ser con Portugal, y después la gente tiene que entender que soy un profesional y que puedo entrenar a otros equipos, pero siempre con algo que me una a ellos. Brasil, obviamente, por la relación histórica entre los países, Inglaterra porque es mi casa, Italia, donde trabajé varios años… pero la primera experiencia tiene que ser con la selección portuguesa”.
Sea destino o coincidencia, Mourinho al mando de Portugal en un Mundial sería, como mínimo, un éxito de taquilla garantizado.
¿Un camino menos transitado?
El Fenerbahçe es un club de gran dimensión internacional, pero pocos habrían esperado ver a José Mourinho rumbo a Turquía. Quizás sea un reflejo de los tiempos, pero también puede ser una señal de la disposición del técnico portugués a aceptar desafíos en clubes y países fuera del círculo de las cinco principales ligas europeas, hoy dominado por una élite más restringida.
Ally McCoist, leyenda del Rangers, comentó en TalkSPORT lo mucho que le gustaría ver a Mourinho entrenar a su antiguo club, aunque reconoció que las limitaciones financieras complicarían la operación. La idea, sin embargo, no parece del todo descabellada, teniendo en cuenta que Mourinho ya ha manifestado en varias ocasiones su admiración por el fútbol escocés y la pasión de sus aficionados.
Mientras tanto, la prensa rusa ha informado que el técnico estaría en negociaciones con clubes del país. Sin embargo, dada la exclusión de Rusia de las principales competiciones deportivas internacionales, tal hipótesis difícilmente avanzará, no solo por las barreras competitivas, sino también por el riesgo de que Mourinho se convierta en persona non grata en el escenario global.
Veredicto
Este es un verdadero momento de puertas giratorias para José Mourinho. En un periodo en el que muchos clubes privilegian perfiles de entrenadores principales en detrimento de gestores más tradicionales, no se prevé que el técnico portugués regrese de inmediato al banquillo de un equipo de élite.
Aun así, si Portugal no cumple con las expectativas en el Mundial del próximo año, crece la percepción de que la selección podría representar el paso más natural en la carrera del Special One.