Más que pasar un año tranquilo y estabilizarse en la máxima división, el Santos necesita recuperar el protagonismo que ha perdido. Desde que Neymar se marchó al Barcelona en 2013, el club nunca ha ganado un gran título nacional o continental.
Los rumores sobre el regreso del astro al Al-Hilal parecen ser una luz al final del túnel, pero al mismo tiempo desvían la atención de la urgente necesidad de un reseteo completo para que el club vuelva a estar entre los mejores equipos de Brasil.

En el período post-Neymar, los únicos trofeos conquistados fueron los dos campeonatos Paulistas (2015 y 2016) y el título de la Serie B en 2024. En cuanto a este último, el club ni siquiera se molesta en mencionarlo en su sitio web oficial. No hay mucho de lo que presumir para el bicampeón del mundo que hizo famoso a Pelé.
Los días de gloria parecen haber quedado atrás en Vila Belmiro. El regreso de Marcelo Teixeira a la presidencia ha sacado al equipo de la segunda división tras el desastroso mandato de Andrés Rueda, pero sigue habiendo pocos motivos para el optimismo. Los debates sobre la transformación del club en una sociedad anónima a la altura de gigantes como Botafogo, Cruzeiro y Vasco siguen generando dudas.

Una reformulación entre bastidores
Incluso con el título de la Serie B conquistado en 2024, el Santos se ha dado cuenta de que necesita reestructurarse para no repetir en 2025 los errores de hace dos años, como el fichaje de demasiados jugadores poco cualificados y el despido compulsivo de entrenadores. Pedro Martins, el nuevo director general, será el responsable de este proceso.
Dejó su puesto de director de fútbol del Botafogo tras un año de éxitos para convertirse en la figura central de la planificación estratégica del Peixe. Martins participó en la elección del nuevo entrenador, el portugués Pedro Caixinha, ex del Bragantino, tras la destitución de Fábio Carille.

"El presidente me explicó cómo se llevó a cabo la planificación y me sentí cómodo con el tiempo disponible para tomar las decisiones. La mejor decisión es la correcta, no la más rápida. Estamos aquí para tomar las decisiones correctas para el Santos. Esa es la base de nuestro trabajo", afirmó Pedro Martins.
El CEO decidió despedir al director del área deportiva, Alexandre Gallo, y asumió él mismo la gestión del área. El Santos también despidió a tres miembros del cuerpo técnico permanente, entre ellos el asistente Marcelo Fernandes, que dirigió al equipo en varias ocasiones.

¿Volverá Neymar?
El destino de Neymar es uno de los grandes misterios del mercado. El astro tiene contrato con el Al-Hilal hasta junio de 2025, pero su futuro parece cada vez más lejos de Arabia Saudí y a principios de año se habló incluso de que rescindiría su contrato para regresar al Santos.
Otra posibilidad es una cesión de seis meses hasta que O Ney resuelva definitivamente su situación. La afición, por su parte, ha intensificado su campaña para convencer a su ídolo.

Las señales sobre el regreso de Neymar al Peixe son constantes por ambas partes. El club no ha ocultado su deseo de que regrese, mientras que el jugador sigue insistiendo en su amor por el Santos.
Al mismo tiempo, la directiva deja claro que las negociaciones son muy difíciles, mientras que Neymar no excluye la posibilidad de jugar en otro equipo, como el Flamengo - y está atrayendo el interés de los equipos de la MLS Inter Miami y Chicago Fire.
"Neymar tiene un poder económico increíble allá donde va. Él y el Santos también están interesados en él. Si viene, no tendré que preocuparme por el aspecto económico. Él se paga solo, sólo con su presencia, la venta de camisetas, entradas y demás. Pero es una operación compleja que no depende sólo del club o del jugador', dijo el director financiero del Santos, Norberto Gonçalves, en una entrevista con Flashscore Podcast.
Aunque Neymar apenas ha jugado en los dos últimos años, el fichaje del astro supondría un gran salto adelante para el equipo, que los aficionados han estado esperando. El equipo cuenta con algunos refuerzos importantes para 2025, como Thaciano y Tiquinho Soares, pero la base del equipo sigue siendo la misma que en la Serie B. Esto puede no ser suficiente para un año difícil.
Promesas sin retorno deportivo
Los mayores títulos de la historia del Santos han sido conquistados por revelaciones de la cantera. De Pelé, Coutinho y Pepe a Neymar y Ganso, Diego y Robinho, las glorias están directamente ligadas a los Meninos da Vila. El club sigue produciendo talentos, pero no los ha convertido en trofeos.
El ejemplo más claro es Rodrygo. El delantero, titular en el Real Madrid y en la selección brasileña, es uno de los mejores jugadores del mundo, pero no ha ganado ni un solo trofeo con el Santos. Tampoco el rendimiento económico de su venta, 45 millones de euros, se ha traducido en el tipo de inversión que habría permitido al club dar un salto de calidad.

Máximo goleador del fútbol brasileño en 2024 con el Corinthians, Yuri Alberto dejó el Santos en 2020, cuando expiró su contrato. Sólo ha jugado 25 partidos con el primer equipo. Gabigol, por su parte, brilló en el Peixe antes de convertirse en ídolo en el Flamengo. Kaio Jorge, que debutó en la final de la Libertadores de 2020, está despuntando en el Cruzeiro.
La ausencia de una organización interna que proporcione una plantilla sólida y estimule a los jóvenes talentos es una instantánea de la larga racha de títulos importantes del club. Queda por ver si el plan para 2025 es tener un año tranquilo o recuperar su lugar perdido entre los gigantes de Brasil.