Fue una actuación que se había hecho esperar y no es de extrañar que Thomas Tuchel estuviera encantado tras el partido. Y con razón.
Inglaterra necesitaba una actuación contundente
Antes de esta exhibición, Serbia no había recibido ningún gol en su actual campaña de clasificación al Mundial y solo había perdido uno de sus últimos 28 partidos clasificatorios, ante Bélgica en septiembre de 2012.
En lo que prometía ser un ambiente intimidante en el estadio Rajko Mitic, los Three Lions sabían que solo una actuación casi perfecta les permitiría llevarse los puntos y tomar el control absoluto del Grupo K.

Las señales iniciales fueron positivas para ellos, ya que los visitantes mantuvieron el 85,6% de la posesión en los primeros 15 minutos. El 100% de acierto en los pases de Reece James (28 de 28) en ese periodo también fue destacable.
Ocho disparos por parte de Inglaterra frente a ninguno de Serbia antes de que llegara el primer gol ya era una señal de que la noche sería larga para los locales, y el tanto, cuando llegó, fue de una sencillez absoluta.
Harry Kane celebró su 109ª internacionalidad con un gol
Harry Kane disputaba su partido número 109 con la selección, lo que lo coloca cuarto en la lista histórica de apariciones de Inglaterra, superando al legendario Bobby Moore, y llegó tarde y sin marca al área para rematar de cabeza un córner lanzado por Declan Rice.
Que los Three Lions hayan marcado en 22 partidos consecutivos de clasificación mundialista es una buena señal, especialmente porque han ganado todos los encuentros de este ciclo en los que anotaron primero, y el gol número 44 de Kane en 40 partidos importantes de este tipo de fases (Mundial/Euro) demuestra una vez más su peso en el equipo.
Elliot Anderson volvió a brillar como mediocentro, y su participación fue clave para el avance ofensivo de Inglaterra.
La mayoría de sus pases fueron hacia Reece James por la derecha (14), hacia atrás para Ezri Konsa (10) o en horizontal para Declan Rice (12), y considerando los pases en sentido contrario, la gran parte del juego de Inglaterra, sobre todo en los primeros minutos, se concentró en esas zonas.
Solo dos minutos y medio después del gol de Kane, una gran jugada permitió a Anderson habilitar a Noni Madueke en espacio libre y el nuevo fichaje de Arsenal definió con gran calidad.
Su primer gol con Inglaterra llegó en su novena aparición con la selección y tras 18 disparos en esos partidos.
La alegría por romper su sequía goleadora era evidente, y puso a los visitantes en una posición privilegiada para el resto del encuentro.
Los Three Lions, en pleno dominio
El descanso no llegaba lo suficientemente rápido para los locales, que no habían logrado disparar a puerta y estuvieron por debajo de su nivel en todo el campo. Veljko Birmancevic, por ejemplo, solo intentó cinco pases en los primeros 45 minutos.
La tónica se mantuvo tras el descanso, e Inglaterra ya había realizado cuatro disparos antes de que Ezri Konsa asegurara el triunfo para el equipo de Tuchel en el minuto 52.
Serbia no recibía tres goles desde septiembre de 2019 ante Portugal, pero era lo mínimo que merecían los de Tuchel.

El jugador de Crystal Palace Marc Guehi, quien asistió a Konsa, también se sumó al marcador, coronando una actuación individual sobresaliente que incluyó el mejor porcentaje de pases completados del partido (97,3%) entre quienes realizaron al menos 25 pases.
Considerando todos los rumores sobre su posible salida de Selhurst Park este verano, dejar eso de lado y rendir a ese nivel merece reconocimiento.
Su gol también significó la primera vez desde el 15 de noviembre de 2021 ante San Marino (10-0) que Inglaterra anotaba cuatro goles en un partido.
El gol de Rashford cerró una actuación colectiva espectacular
Un penalti tardío provocado por Ollie Watkins le dio a Marcus Rashford la oportunidad de poner el quinto, y su acierto desde los 11 metros supuso la derrota más abultada de Serbia en casa en competición oficial. Además, quedarse sin lograr ni un solo disparo a puerta fue la primera vez que les ocurría en partidos de clasificación mundialista desde al menos 2010.
Otra portería a cero para Inglaterra significa 740 minutos sin encajar goles, la racha más larga en la historia de la selección. A pesar de las críticas por los malos partidos ante Andorra (dos veces) y Senegal, es una estadística para presumir.
Y no solo en defensa destacó Inglaterra.

24 disparos, 12 de ellos a puerta, un xG de 4,22 y 37 toques en el área rival son señales de que Thomas Tuchel está logrando transmitir su idea en todas las zonas del campo.
Ahora, con siete puntos de ventaja sobre sus perseguidores, Inglaterra está en una posición inmejorable para clasificarse para el gran evento del próximo año, y con Tuchel, la selección nacional podría haber encontrado al hombre capaz de llevarlos hasta el final esta vez.
Consulta las estadísticas del partido entre Serbia e Inglaterra.
