Dos cabezazos casi consecutivos, en los minutos 75 y 79, le dieron al combinado cafetero una inédita victoria. Su padre y primer entrenador, Luis Manuel, rompió a llorar en la tribuna del Estadio Metropolitano de Barranquilla tras cada tanto.
En declaraciones a Caracol Televisión tras finalizar el partido, Luis Manuel Díaz aseguró que se sentía "emocionado" porque logró la libertad gracias a su hijo y a todo el pueblo colombiano. El padre de 'Lucho' agregó que "hoy había un motivo para hacer gol y para festejar".
Brasil se había adelantado con un gol de Gabriel Martinelli recién inaugurado el choque, después de una brillante pared con Vinicius Júnior, quien se marchó en la primera parte por una molestia en la pierna izquierda.
La Seleçao sufrió su segunda derrota consecutiva y cayó al quinto puesto de la clasificación con siete puntos. Mientras, Colombia ascendió a la tercera casilla con nueve unidades.
"Hemos pasado siempre por momentos duros, pero la vida te hace fuerte y valiente", aseguró el jugador a la prensa.
Sudamérica dispone de seis billetes directos para el Mundial de 2026, mientras que el séptimo jugará una repesca contra una selección de otro continente.
En deuda con su afición después de tres partidos sin ganar, la pentacampeona recibirá el martes a Argentina, líder con doce puntos y que cayó por 0-2 ante Uruguay tras catorce encuentros invicta, en una nueva edición del clásico sudamericano.
"Tuvimos la oportunidad de marcar el segundo gol, el tercer gol, y no marcamos", dijo Fernando Diniz tras la derrota.
Por su parte, Colombia visitará a Paraguay (cinco puntos) el mismo día por la sexta jornada.
Un cuento de hadas
Tras el descanso, el seleccionador argentino de Colombia, Néstor Lorenzo, se la jugó con dos jóvenes atacantes que militan el fútbol inglés para acompañar a Lucho: el extremo del Bournemouth Luis Sinisterra y el mediapunta del Watford Yasser Asprilla sustituyeron a Mateus Uribe y al lateral Deiver Machado.
Cuando la defensa local hacía agua y el ataque parecía estancado, el partido se convirtió en un verdadero cuento de hadas.
Entrando al cuarto de hora final, Díaz -quien permaneció en el campo a pesar de una molestia que lo hizo cojear en algunos tramos del complemento- se elevó por encima de la defensa rival para anotar de cabeza el empate.
Las cámaras se quedaron con las lágrimas de su padre mientras sus compañeros abrazaban a Lucho.
Minutos después, volvió a volar y conectó un preciso envío de James Rodríguez para sentenciar la victoria.
Tras el final, Alisson se acercó a felicitar al ariete, que pasó de llorar el miércoles junto a su padre, en su primer encuentro entre ambos tras la liberación, a dedicarle los goles de la histórica victoria.