De la nada al todo en cuestión de semanas. Así ha sido hasta el momento el verano de Liam Delap (22) y Dario Essugo (20), dos jugadores que, aunque con menos protagonismo de sus compañeros en el Chelsea, pueden presumir de ser campeones del Mundial de Clubes tras haber aterrizado en Stamford Bridge en el mes de junio.
Aunque lo sucedido de Joao Pedro, fichado antes de los cruces del torneo y decisivo en la semifinal y la final, acapara la atención de los medios, lo cierto es que la historia de estos dos jugadores es de lo más curiosa, pues hace tan solo unos días lo que hoy son sonrisas eran lágrimas de tristeza y frustración.