Más

Singo debería haber sido expulsado por el golpe a Donnarumma, dice el arbitraje francés

Singo y Donnarumma, durante el incidente en el Mónaco-PSG de la Ligue 1.
Singo y Donnarumma, durante el incidente en el Mónaco-PSG de la Ligue 1. VALERY HACHE/AFP
Durante su informe arbitral semanal, la Federación Francesa de Fútbol volvió sobre la acción que provocó la lesión del guardameta parisino Gianluigi Donnarumma durante el partido de la 16ª jornada de la Ligue 1 contra el AS Mónaco.

Intencionada o no, como fue el caso aquella tarde por parte de Wilfried Singo, es el tipo de imagen que uno no quiere ver en un campo de fútbol. Y, sin embargo, el 18 de diciembre, en el estadio Louis II, François Letextier tomó una decisión muy sorprendente, a la vista del golpe propinado por el defensa del Mónaco a Gianluigi Donnarumma, el portero del París Saint-Germain, y de las consecuencias que de ello se derivaron.

En el minuto 17ᵉ del partido, Singo irrumpió en el área rival antes de encontrarse frente al italiano, que había salido a sus pies. Llevado por su ímpetu, el defensa golpeó antes de saltar, viendo cómo su adversario se abalanzaba sobre él, pero no pudo evitarlo. Como consecuencia, el pie derecho del jugador local impactó violentamente en la cara del meta, que abandonó el terreno de juego tras serle aplicadas grapas en la herida. A pesar de lo ocurrido, el colegiado del partido no decidió sancionar al marfileño, que ya tenía una amarilla.

"Al analizar las imágenes, el delantero sí tocó el balón, pero su acción puso en peligro la integridad física del arquero, ya que la suela de su bota le golpeó directamente en la cara. Por lo tanto, esta situación constituye una falta grave en el sentido de la Regla 12 (relativa a las faltas y a la conducta antideportiva)", se lee en la página oficial de la FFF.

El VAR tampoco intervino. En el descanso, el guardameta del PSG arremetió contra el que había sido nombrado mejor árbitro del mundo en 2024, diciendo que se sentía desprotegido. Errar es humano, pero cuando un futbolista sale lesionado con la cara desfigurada, lo menos que se puede hacer es tomar la decisión correcta.