El Betis no llegaba en las mejores condiciones. Para empezar, le faltaba Borja Iglesias. Sin el “Panda” arriba el equipo verdiblanco pierde una referencia ofensiva de primer nivel. Jugó en su lugar William José, escoltado por Ayoze Pérez y el brasileño Luiz Enrique. Aparte de la prolongada ausencia de Fekir (sin el cual su equipo sólo ha ganado 2 partidos de 10), en el minuto 11 se lesionó Luiz Felipe, el líder de la zaga. Los problemas crecían para el Betis. Edgar salió para intentar frenar la ofensiva azulgrana, que se iba incrementando.
Poco pudo hacer ante el primero del Barça. O, mejor dicho, sí pudo, pero no lo hizo, igual que sus compañeros en defensa. Raphinha puso un centro con música desde la banda derecha y el danés Christensen, que volvía tras lesión, remató sólo de cabeza ante Rui Silva aprovechando un grosero error de marcaje de los centrales béticos. Abrir pronto la lata da cierta tranquilidad para afrontar el resto del encuentro.
La lluvia que tanto necesita este país empezó a caer con ganas en el Camp Nou. Bajo el diluvio el Barça seguía atacando sin excesivo peligro y el Betis contragolpeaba con menos convicción aún. William Jose chutó fuerte y cruzado desde fuera del área pero el balón se perdió a la derecha de la portería de Ter Stegen.
Edgar, 20 minutos sobre el campo
Desde que salió al campo estaba claro que no era el día de Edgar. Apenas duró 20 minutos en el campo porque, tras una rigurosa amarilla, vio la segunda por un pisotón a Pedri. En el minuto 32 el Betis se quedaba con diez. A los de Pellegrini les tocaba subir el Everest en chanclas para intentar sacar algo positivo de su visita. Se les ponía todo en contra. Más aún cuando Lewandowski remató cruzado un centro desde la derecha de Koundé en el 35 para poner el 2-0. El partido estaba encarrillado. El unocerismo no iba a aparecer por el Camp Nou en este partido.
Tras un buen rato tirando líneas en la sala VOR por un posible fuera de juego, se dio validez a un gol de Raphinha que suponía el 3-0 antes del descanso. Pezzella habilitó al brasileño y los andaluces se hundían cada vez más. La tormenta que le estaba cayendo al Betis no aparecía en ningún parte de meteorología futbolística previa al partido.
En la reanudación el Barça seguía dominando con suficiencia. El Betis se desperezaba con timidez de vez en cuando. En una de sus escasas aventuras ofensivas una buena jugada de Ayoze con remate de Miranda fue interceptada por Ter Stegen, casi un espectador más sobre la lluvia. Los blaugrana buscaban una goleada mayor pero también bajaron un par de marchas, algo comprensible viendo el marcador.
En el minuto 62 Joaquín salió por última vez al Camp Nou como profesional y recibió el reconocimiento general de otro público rival. Será en todos los campos de aquí a final de campeonato, con la duda de lo que pasará en el Sánchez Pizjuán, donde, salvo sorpresa, no se espera una gran ovación. No tuvo suerte el gaditano de El Puerto de Santamaría ya que 16 minutos después de entrar se lesionó en una acción de disputa de balón con Koundé. A Pellegrini no le quedaban cambios disponibles y el Betis se quedó con 9. No era su día.
Para que la fiesta fuese completa, en el minuto 72 reaparecía Dembelé tras una larga ausencia por lesión. Raphinha le ha puesto el listó alto pero, cuando coja el ritmo del equipo, el francés está por delante del brasileño en las preferencias de su entrenador. En la banda calentaba el quinceañero Lamine Yamal y Xavi le llamó en el minuto 81. Justo antes de su entrada Guido marcaba en propia puerta el cuarto del líder.
Debuta un chico de 15 años
Lamine Yamal se convirtió, en el minuto 83, en el jugador más joven del siglo XXI, en debutar con el Barça. Habilidoso, rápido, atrevido y con mucha calidad, el chaval se estrenó antes de cumplir 16. Le espera un brillante futuro por delante. Un error de Montoya casi lo convierte más aún en su día de gloria porque Yamal remató sólo ante Rui Silva y el portugués evitó el gol. El alirón está más cerca.
Jugador Flashscore del partido: Raphinha
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