Y lo cierto es que el gol se le ha resistido al delantero madrileño. Álvaro Morata (31) llevaba ocho partidos consecutivos sin ver puerta a los que hay que añadir otros dos en los que no participó por lesión.

Ante el Betis tuvo la oportunidad de romper esa racha en el 28. Un minuto antes, Rui Silva le había derribado dentro del área y Soto Grado, después de consultar al VAR por un posible fuera de juego, señalaba pena máxima. El lanzamiento de Morata fue adivinado por el meta portugués y el 19 del Atleti tampoco pudo batirle en los tres rechaces posteriores.

Pero, el gol llegaría finalmente en el minuto 43. Un disparo potente de Rodrigo De Paul fue rechazado por el cancerbero de Águas Santas, pero ahí estaba Morata para aprovechar el rechace y conseguir de cabeza el 2-0. La mala racha ya es historia.