Pepe Castro, presidente sevillista, inició el acto alabando y agradeciendo el “enorme esfuerzo económico” que ha hecho Sergio para poder fichar. Luego, fue el turno del camero.
Expectación: “Es un día inolvidable. Vuelvo a casa tras 18 años. Regreso a casa y me siento orgulloso rodeado de mis seres queridos. Es un sueño hecho realidad. Es emocionante. Agradezco a la afición y a todo el sevillismo que me abra las puertas de nuevo. Me fui siendo un niño y soltero y ahora vuelvo con mi mujer y cuatro niños. No tenía sentido tomar otra decisión teniendo esta posibilidad. Me acuerdo de Antonio Puerta y de mi abuelo, que me hizo sevillista de cuna. Me siento feliz”.
Motivo del regreso: “Es algo sentimental. Era momento de cerrar el círculo. Había que consolidar el vínculo que tengo con este club. No me quiero morir sin ganar un título con este equipo”.
Llegada a última hora: “Si estoy aquí es por algo. Habrán tomado una decisión consensuada en el club a pesar de lo que hayan dicho durante el verano. Remamos juntos en la misma dirección. El pasado no importa”.
La llamada: “Hasta el último día no hubo nada real pero nunca perdí la esperanza. El destino está escrito en parte y la otra depende de uno mismo pero la ilusión siempre era volver aquí. Cuando me llamaron no lo dudé ni un segundo. Volver al Sevilla era una necesidad emocional”.
Objetivo: “Creo en el proyecto. Aquí están Rakitic y Navas. Ellos volvieron a casa y ganaron títulos. Esa es la esperanza que tengo. Es difícil porque nadie regala nada pero podemos ganar algún título”.
Su salida hace 18 años: “No fue un pago de cláusula. Fue un acuerdo entre clubs. Tal vez se contó mal la historia pero eso fue así”.
Sentimiento: “Ha sido emocionante volver al Sánchez Pizjuán. Cuando me lo dijo mi hermano pasó a ser la única opción”.
Reconciliación: “He notado de nuevo el cariño del sevillismo. Hice gestos que estuvieron mal en su día. Fue un error y espero que sepan perdonarme”.
La selección: “Si las circunstancias se dan ya se verá. Todo el mundo sabe lo que significa para mí representar a mi país”.
Veteranía: “No hay jugadores jóvenes o viejos, los hay buenos y malos. El examen se pasa en el césped”.
Un club diferente: “Es un orgullo ver lo que ha crecido el club desde mi marcha y los títulos que han conseguido”.
Disidentes: "A los que aún no están convencidos de mi vuelta intentaré convencerlos en el campo. Ya he pedido perdón varias veces. Todos llevamos el mismo escudo en el pecho".
Regreso al Bernabéu: "Tengo el corazón partido por la mitad. Espero que me reciban con el mismo cariño que yo les tengo a ellos".
Rubiales: "Su comportamiento ha sido inaceptable. Se ha equivocado".