Rectificar es de sabios. El Sevilla arrancó mal la pasada temporada. Con Jorge Sampaoli la tendencia era negativa. El club le mantuvo hasta que comprendió que no iba a levantar al equipo tras sumar 28 puntos en 26 jornadas y estar coqueteando con los puestos de descenso. La apuesta de Monchi fue José Luis Mendilibar, un entrenador veterano, curtido en mil batallas en el barro y muy lejos de los parámetros digitales y del Big Data de los técnicos modernos.
Su impacto fue brutal nada más llegar. Mendilibar logró cuatro victorias y un empate en los cinco primeros partidos, supo mantener el rumbo y la intensidad del equipo para evitar los altibajos y le cambió la cara completamente. De un conjunto disperso y sin confianza pasó a ser un grupo homogéneo, sólido y con una personalidad arrolladora.
No pasó apuros en LaLiga y dio la gran sorpresa ganando la séptima Europa League tras eliminar, de forma impecable, a Manchester United y Juventus para rematar la faena ganando a la Roma en la final de Budapest. Ni el más optimista de los sevillistas podía haber imaginado algo así unos meses atrás. El fichaje y la renovación de “Mendi” fue la última gran aportación de Monchi antes de marcharse al West Ham.
Puntos fuertes
Para esta temporada, el Sevilla tendrá que compaginar la exigencia de LaLiga y la Champions más el aperitivo inicial de la Supercopa de Europa frente al Manchester City y la Copa. Con el reto de mantener el nivel en todas las competiciones, Víctor Orta, el nuevo director deportivo, aprovechando parte del trabajo realizado por Monchi y su equipo de trabajo, ha incorporado al lateral izquierdo Pedrosa, procedente del Espanyol, a Federico Gattoni, de San Lorenzo, y a la más reciente llegada, la del centrocampista suizo Sow, fichado al Eintracht de Frankfurt, por 10 millones.
De todas formas, tal vez el mayor éxito ha sido comprar a Loic Badé, del Rennes, por 12 millones de euros. Su rendimiento sorprendió muy gratamente la pasada temporada y en el Sánchez Pizjuán han hecho un esfuerzo para contratarlo. Esas caras nuevas, junto al resto del grupo ya formado y la dirección de Mendilibar llegará para aspirar a importantes desafíos. Hay gran confianza en Suso, un talento al alza.
Puntos débiles
El mercado es un gran temor. Varios equipos han tentado a En Nesyri y a otros futbolistas importantes del equipo. Hasta el cierre del mercado nadie estará tranquilo. Rakitic, alma máter de los hispalenses, deberá ir cediendo protagonismo. El Modric sevillista tendrá que ir dosificándose. Sobran muchos jugadores y es necesario darles salida. Han vuelto los cedidos Óscar, Januzaj, Idrissi, Delaney y Augustinson, entre otros, pero algunos de ellos no llegarán a iniciar la temporada. Se han marchado Rekik, Carmona, Bryan Gil, Pape Gueye y Alex Telles y lo harán otros. Bono, Rafa Mir y algunos otros futbolistas han recibido ofertas suculentas. Mendilibar necesita saber con quién puede contar y con quién no.
Objetivo Champions
De aquí al cierre del mercado aún habrá novedades hasta conformar la plantilla definitiva pero el bloque es compacto y, con “Air” En Nesyri en forma, el equipo andaluz puede aspirar a entrar en zona Champions en LaLiga y a realizar un buen papel en la máxima competición europea.
La Real Sociedad, un ejemplo de gestión deportiva
En Donosti están disfrutando de un ciclo esplendoroso del equipo txuri urdin. El cuarto puesto en LaLiga de la pasada temporada es una recompensa al trabajo del presidente Aperribay en la cúpula, de Roberto Olabe y Erik Bretos en la dirección deportiva y de Imanol Alguacil en el banquillo. La llegada de jugadores como Kubo, Silva y Sorloth potenciaron un equipo que ya era bastante solvente.
El objetivo de esta temporada debe ser repetir la actuación de la última en liga y llegar lo más lejos posible en Europa. Se han ido jugadores como Illarramendi y Sorloth pero la baja más sensible, sin duda, será la de David Silva. El mago de Arguineguín, que había renovado por una temporada más, se lesionó de gravedad y ha dicho adiós al fútbol. Su ausencia se notará mucho en el equipo blanquiazul.
Se han incorporado fichajes interesantes como el lateral derecho Hamari Traoré y el delantero André Silva, se ha logrado mantener a Zubimendi, ancla del equipo, y se espera que Oyarzábal, líder blanquiazul, alcance velocidad de crucero tras haber salido de una grave lesión a mediados de la pasada campaña. Se busca un imposible, un sustituto para David Silva. El holandés Donny Van de Beek, sin mucho protagonismo en el United, es una de las opciones que se manejan.
Puntos fuertes
Se mantiene el compacto bloque formado por Imanol. André Silva tendrá que hacer de Sorloth y se espera mucho de Traoré en la derecha. El resto deberá mantener su nivel, con un Take Kubo espectacular que sigue creciendo a pasos agigantados. Su papel será fundamental. Brais Méndez, que empezó muy bien y acabó regular la pasada campañan, deberá mantener una mayor regularidad. Jugadores como Le Normand, Zubeldia, Merino, Zubimendi y Oyarzábal son de contrastada calidad. Imanol, desde el banquillo, volverá a ser fundamental como ejemplo de sensatez y coherencia.
Puntos débiles
La ausencia de David Silva restará brillo y clarividencia al ataque realista. Su presencia es imposible de cubrir pero Kubo, Brais y Míkel Merino deberán dar un paso al frente. La incógnita es saber cómo gestionará Imanol la exigencia de Champions y Liga, algo a lo que no está muy habituado.