Era algo que ya se había cerrado de manera verbal tras las últimas reuniones que su agente, Jorge Mendes, había mantenido con Deco y con la cúpula del Barcelona. De lo hablado meses atrás, salvo la duración, poco quedaba porque el status de la joven estrella ha cambiado radicalmente en los últimos meses. De un proyecto de crack a un crack con todas las letras y aspirante ya al Balón de Oro. Ahí es nada.
Y por eso hubo que renegociar las condiciones económicas del acuerdo, colocando a Lamine Yamal en la más alta escala de la entidad culé. No será el mejor pagado, ni tampoco lo había pedido él, pero sí estará entre los más altos salarios, que incluirá diversos bonus de aquí hasta la finalización del nuevo contrato, que lo vincula hasta el final de la temporada 30/31.
El jugador, según ha comunicado la entidad azulgrana, ha firmado su nuevo contrato este martes en las oficinas en un acto con el presidente del FC Barcelona, Joan Laporta; el vicepresidente primero, Rafa Yuste; y el director deportivo, Anderson Luis de Souza "Deco", entre otros.
Una irrupción espectacular
"La renovación de Lamine Yamal es una demostración de la solidez del proyecto culer. La suya es una aparición como pocas se recuerdan en el panorama futbolístico mundial, que comenzó con el debut el 29 de abril de 2023, aún con 15 años. Desde ese día, el de Rocafonda no ha hecho más que crecer en importancia sin dejar de lado su estilo divertido, valiente y desacomplejado", ha comentado el Barcelona al anunciar el compromiso de larga duración de su jovencísima estrella.
Y es que el extremo zurdo, que juega por la derecha, como empezó Messi, al que no han dudado en compararle, no ha parado desde su estreno en derribar récords de precocidad. Es, por mencionar alguno, el goleador más joven de la historia de LaLiga, la Copa del Rey y la Supercopa de España. También, el más joven en disputar 100 partidos con el Barça. Ya acumula 106 y aún no ha cumplido la mayoría de edad.
Leyendas del fútbol se han rendido a su capacidad de desborde, a su inteligencia para encontrar espacios y las mejores jugadas en los momentos más complicados, y en una madurez capaz de soportar patadas de los rivales y no meterse en jaleos ni responder a provocaciones en el campo.
Ahora intentará seguir aumentando su nivel y ganar títulos durante seis años más en el club al que llegó cuando apenas tenía siete añitos.