"Cuanto mejor peor para todos y cuanto peor para todos mejor, mejor para mí el suyo beneficio político", dijo un día Mariano Rajoy en el Congreso de los Diputados. Nadie terminó de entender lo que quería decir el expresidente del Gobierno de España, muy aficionado a la prensa deportiva, aunque se puede buscar (o intentarlo) el símil futbolístico: si al Madrid le va mal y el Barcelona entra en barrena, entonces el primero está sólo regular.
Carlo Ancelotti recuperó a Rodrygo Goes para el duelo ante el Getafe y, consciente de la necesidad de ganar para sacar beneficio del tercer tropiezo consecutivo de los culés, no tardó en darle galones ante la ausencia del lesionado Vinicius Júnior. En total, hasta cuatro novedades respecto al once que salió y sucumbió en Liverpool: Lucas Vázquez, Fran García y Dani Ceballos, las otras caras nuevas en el equipo merengue.
Una celebración anhelada
Se retrasó el comienzo del duelo por unos problemas de conexión con la sala VOR, lo que enfrió el ambiente por momentos. El pitido inicial de Alejandro Hernández Hernández animó a un público dispuesto a indultar a los suyos tras la derrota en Anfield. El equipo azulón salió rebelde y contestón, presionando en campo rival e intentando no hundirse en su campo, aunque sin inquietar a un Thibaut Courtois que pasó muy desapercibido.
Poco a poco, el vigente campeón empezó a ganar terreno. Pero todo cambió en el minuto 26, cuando Allan Nyom -amonestado previamente por una situación muy parecida y sustituido al descanso para evitar riesgos- agarró a Antonio Rüdiger dentro del área y el árbitro señaló pena máxima (ya se había reclamado una al extremo brasileño en los compases iniciales). Jude Bellingham asumió la responsabilidad y, con mucha calma, engañó a David Soria.
El mediocentro inglés, reemplazado al descanso al estar algo mareado, hizo buena una fantástica salida de Fran García y se la cedió a Kylian Mbappé al espacio en la acción del 2-0. El galo recortó, levantó la cabeza y la colocó en la zona interna del poste izquierdo. Estalló de alegría el ex del París Saint-Germain, y la ga grada del templo blanco junto a él. Necesitaba un gol así ante la necesidad de liberarse y de dejar atrás actuaciones como la del Clásico o la del miércoles.
Y pudieron ser más
Jugar con el resultado a favor siempre es más sencillo, si bien conlleva algo de riesgo por la tentación de caer en un estado de relajación. Y en una de esas acciones que no se esperan y pueden darse, el recién ingresado Christantus Uche estrelló el cuero en la madera. Su intento de gol le salió muy caro porque sufrió una lesión muscular en el golpeo y, tras forzar durante un buen rato, se resignó a abandonar el terreno de juego.
Los locales buscaron a Mbappé con insistencia y este pudo convertirse en asistente gracias a un formidable pase de cuchara a Brahim, que eligió el peor de los caminos en la definición. El propio Kylian pudo marcharse con al menos un hat-trick dado que gozó de un sinfín de oportunidades. La afición se mostró empática y comprensiva, no así cuando vio cómo Patrick rozaba el 2-1 en un envío que tocó el travesaño y el palo. Esta triunfo aviva la lucha por el título liguero.
Jugador Flashscore del partido: Jude Bellingham.