El Barcelona visitaba uno de sus jardines preferidos, La Cerámica, donde no pierde desde el 20 de octubre de 2017 (3-1 gracias a un tanto de Santi Cazorla y un doblete de Marcos Senna desde los once metros). El reto era mayúsculo para el Villarreal, que necesita dar un salto de calidad para volver a la Champions League y, por una cuestión de amor propio, afrontaba la cita con la relativa urgencia de poner fin a la malísima racha frente al conjunto azulgrana.
Quique Setién, ex del cuadro culé, estaba en el césped y Xavi Hernández veía todo desde el palco debido a su sanción. Como si fuera mayo y una plaza en competiciones europeas estuviera en juego, el cuadro anfitrión salió al campo haciendo ruido y dispuesto a marcar terreno. Y todo personificado en un tipo que roza los dos metros y asusta con sólo dar unos pasos: Alexander Sorloth. Desesperado Étienne Capoue porque estaba sólo para rematar, el nórdico falló ante Marc-André Ter Stegen en lo que parecía el 1-0. Logró mandar el balón a la red en otra acción que fue invalidada por un ajustadísimo fuera de juego.
Un festival de goles
Estaba el público contento porque veía a su equipo motivado, pero este deporte sólo entiende de efectividad y los visitantes la tuvieron por partida doble rondando el cuarto de hora en tres minutos mágicos: Pablo Gavi apareció desde segunda línea para, sin oposición, aprovechar un pase fantástico de Lamine Yamal antes de que Frenkie de Jong recibiera una 'asistencia' involuntaria de Alfonso Pedraza y castigara a los groguets. Ni siquiera necesitaron a Robert Lewandowski, sí al portero germano, que mandó el esférico a córner y, justo en esa acción, Juan Foyth recortó distancias con un fantástico testarazo (26').
Cada vez creaba más peligro el lateral izquierdo local, que aprovechó la poca contundencia del prometedor adolescente, con el cariño de un técnico que volvió a entregarle su confianza. Pese a que estaba sufriendo en defensa y había visto una tarjeta amarilla, siguió en el campo hasta el 76' y recibió un buen puñado de aplausos a modo de reconocimiento. El tanto de Sorloth durante el tramo final de la primera parte, un estreno goleador aderezado por una brillante intervención del talentoso Gerard Moreno, no cambió los planes de Xavi, que sacó a Andreas Christensen (por Eric García) debido a unas leves molestias.
El Villarreal paga sus platos rotos
Oriol Romeu probaba fortuna al inicio del segundo acto y Álex Baena hacía buena la decidida conducción de Pedraza, con una autopista por su banda, para dar forma a la remontada en el 50'. Fue entonces, tras unos minutos de levitación, cuando Yamal se echó el equipo a la espalda. Un zapatazo a la cruceta intimidó a la zaga y dio pie al resto para generar un bucle de ocasiones que obligaron a Filip Jörgensen a hacer varias paradas de mérito. El ariete polaco empezó a activarse, Marcos Alonso adelantó su posición y Ferran Torres, que acababa de entrar, dio un auténtico mordisco de tiburón (3-3).
El futurible internacional español (absoluto) de 16 años culminó su sobresaliente partido con una jugada desde fuera hacia adentro que el arquero rechazó al poste, pero ahí estaba Lewandowski para empujarla. Ansu Fati tuvo varias opciones con muchos espacios a la espalda de la zaga y hasta Fermín López, sensación de la pretemporada y debutante en LaLiga, se quedó muy cerca de anotar el quinto. Con los de casa ya sin energía, la manita estuvo mucho más próxima que la igualada.
Jugador Flashscore del partido: Lamine Yamal.