Hace tan solo un mes, el pasado 18 de abril, el aficionado blanquiazul vibraba y celebraba con los suyos la casi segura permanencia en Primera división. Acababa de ganar el Espanyol al Getafe y sumaba tres victorias consecutivas que le habían servido para colocarse 13º con 38 puntos, con una ventaja de siete sobre la zona de descenso. Aún quedaban seis jornadas, pero nada hacía presagiar, y menos aún cuando en el siguiente encuentro firmó un empate en Mestalla, que todo se iría al traste en las siguientes cinco semanas.
Perdió ante el Villarreal (1-0), el Betis (1-2), el Leganés (3-2), el Barcelona (0-2) y Osasuna (2-0). 0 de 15 puntos posibles. Resultados que han hecho que los de Manolo González, de imaginarse incluso luchando por Europa, se vean ahora en la última jornada obligados a ganar para no depender de un tropiezo de su único rival, el citado Leganés, que le tiene ganado el goal average en caso de empate.
A pesar de las grandes actuaciones de Joan García, el portero de moda del fútbol español y el que más paradas ha realizado en toda LaLiga con 142 (3,84 por partido), los barceloneses han encajado en esta negativa racha 10 goles, dos por partido. Una sangría que no han podido solventar en la ofensiva, pues sólo han marcado tres tantos, repartidos en dos encuentros. Y en el que más, en una derrota en Butarque contra su ahora gran rival, anotó dos cuando ya perdía 3-0.

Ha sido un enorme hándicap durante toda la temporada ese de perforar las metas contrarias. 36 en todo el curso. 11 de esas dianas han llevado la firma de su capitán, Puado, que no marca desde el empate frente al Valencia. Su sequía ha llegado cuando más se le necesitaba. Su mejor socio, llegado en el mercado invernal, ha sido Roberto, que ha marcado seis en 18 partidos, pero que también ha perdido su puntería. En estos cinco últimos encuentros ha marcado uno. Y sin ellos, el Espanyol bien poco puede hacer. Sus cinco últimas, y ya lejanas, victorias llegaron cuando dejó su puerta a cero.
A pesar de todo esto, los catalanes aún tienen en su mano salvarse. Si ganan a Las Palmas, que ya está descendido, será el Leganés el que baje. Pero ojo que los pepineros también juegan contra el otro descendido, el Valladolid. El sábado, sobre las 20.30 horas sabremos el destino de ambos.
