Los errores de la defensa sevillista en el arranque del partido en el Nuevo Mirandilla les costaron dos goles. Pese al empate conseguido, esta circunstancia provocó una contundente llamada de atención por parte de Ivan Rakitic. "Otra vez con cara de tonto, otra vez enfadados y otra vez darle vueltas a la misma tontería. Tenemos que ser sinceros con nosotros, no podemos empezar un partido así".

El croata, que consiguió en Cádiz su gol número 50 como sevillista, valoró la reacción del equipo pero considera que estos fallos los pueden pagar muy caros en el caso de que se repitan. "Esto es LaLiga y no se permite bajar el nivel ni el cinco por ciento. Muy enfadado de empezar así el partido, orgulloso de la forma de darle la vuelta pero tenemos que tener tranquilidad y buscar más ocasiones para llevarnos el partido".

La temporada pasada, el Sevilla estuvo coqueteando con el descenso durante parte de la temporada. La reacción final con Mendilibar y la conquista de la séptima Europa League en la final ante la Roma terminaron aplacando las críticas y desatando la euforia en Nervión.

La Champions, asignatura pendiente

Pero esta temporada más de lo mismo. El cambio de entrenador, aunque en el juego ha traido mejoras, no lo ha hecho en el apartado de resultados que es lo que marca la clasificación.

La situación es preocupante en Champions. Mientras el Sevilla domina con mano de hierro la Europa League, donde se impone aunque sea por pequeños detalles, en la primera competición continental le falta punch y le condiciona el resto de competiciones. 

La temporada pasada, cayeron a la Europa League, en un grupo complicado con el City y el Dortmund, pero en la presente temporada por plantilla deberían pasar de ronda junto al Arsenal. En cambio, los partidos ante PSV Eindhoven y Lens se saldaron con sendos empates, que pueden acabar lastrando su futuro en la competición.

Los primeros partidos de Diego Alonso han sido ante rivales complicados. No obstante, se han producido varios cambios con jugadores que tienen que acoplarse. Adriá Pedrosa, Badé y Fernando han desaparecido del once. Acuña ha vuelto a tener protagonismo y han irrumpido Soumaré o Mariano.

El próximo partido de Liga es en Vigo. Es crucial para escapar de la zona de peligro y pensar en otra cosa. Antes, la Copa del Rey en Quintanar de la Orden.