Hay encuentros que marcan una temporada, y el de este domingo podía ser uno de ellos para los andaluces: último partido del año en casa, mala racha de resultados y posibilidad de dejar al próximo rival a 10 puntos. Y por si fuera poco, la gran remontada que protagonizó el Girona ante la Real Sociedad, con consecuencias fatales en el caso del destituido Sergio Francisco, había apretado de lo lindo la lucha por evitar el descenso.
Otro que va camino de tomar esa misma dirección es, salvo que dé con la tecla pronto, Luis Carrión. Y eso que es el segundo técnico del equipo carbayón en lo que va de temporada. Incapaz de ganar desde que reemplazó a Veljko Paunovic, su crédito parece haber terminado porque está lejos de cumplir con el cometido de mejorar a su predecesor. La visita al Ramón Sánchez-Pizjuán, contra un rival herido, se presentaba como una buena oportunidad.
A pedir de boca para el Sevilla
Los visitantes arrancaron con buenas sensaciones e incluso con un cabezazo de Salomón Rondón que atrapó Odisseas Vlachodimos sin demasiados apuros. El viento parecía soplar a favor de los asturianos, pero cuando el nivel en defensa es tan bajo, las opciones de sacar algo positivo disminuyen exponencialmente. Lucien Agoumé firmó un sensacional pase, nadie hizo por cortarlo y Akor Adams superó a Aarón Escandell con un tiro mordido.
El 1-0 fue un duro mazazo para el Oviedo por lo inesperado, aunque apenas una pequeña herida en comparación a lo que sucedió minutos después: eterna revisión -unos cinco minutos- por una mano de Batista Mendy dentro del área que no se tradujo en penalti debido a la falta previa de Leander Dendoncker y, de forma casi inmediata, otro gol en contra en un ataque con origen en un saque de banda. De la posibilidad de empatar al tanto de Djibril Sow en el 22'.
El delantero nigeriano, que fue capaz de atraer a hasta tres rivales en la última acción, pudo resolver la faena antes de que llegara el tiempo de descanso. Un bote, otro, uno más... y así hasta que remató por encima del larguero. La zaga, con David al cuadrado en el eje (Costas y Carmo), volvió a quedar retratada en Nervión. Un fallido disparo de Lucas Ahijado y poco más por parte de un recién ascendido que mira de nuevo hacia Segunda.
Una imagen pésima
La afición del Sevilla disfrutó a ratos de un fútbol champán que vivió su momento cumbre en el 3-0. Adams protagonizó una fantástica dejada a Mendy y el francés se sumó a la fiesta gracias a un brillante recorte y una soberbia definición (51'). Luego, Escandell frustró hasta en dos ocasiones al MVP del duelo para evitar que la sangría fuera mayor. El líder de LaLiga en paradas abroncó más de una vez, y con razón, a los suyos.
Carmo decidió que ya era suficiente por hoy y se autoexpulsó con dos tarjetas amarillas. Pese a la situación de inferioridad numérica, Forés estuvo a punto de anotar gracias a un notable servicio de Brekalo desde la derecha. Y cuando el choque estaba ya listo para sentencia, Ejuke aprovechó la pasividad de unos profesionales indignos con varios regates dentro del área y batió a Aarón (89') por debajo de las piernas. Hubo conato de tangana al final, pero quedó precisamente en eso.
Jugador Flashscore del partido: Akor Adams.