Sergio Canales (32) abandona el Real Betis con "mucha pena" porque tenía pensado colgar las botas vestido como verdiblanco. Así lo explicó ante los medios oficiales de la entidad del Benito Villamarín tras confirmarse su aterrizaje en México. El Rayados, que aspira a dar un salto de nivel tanto en el Torneo Apertura como en la Leagues Cup, tiene unas expectativas muy elevadas.

"Sabía que venía aquí desde unos meses atrás, así que ese verano fue tranquilo, pero tenía una ilusión tremenda. Me sentía más preparado que nunca para dar un salto en mi carrera, llegar a un sitio y sentirme importante. Y vine al mejor posible", explicó el internacional con España, una tarea que se le va a complicar en un futuro más cercano, cuando echó la vista atrás un lustro.

"El primer año estuvimos cerca con las semifinales y creo que era un objetivo muy bonito. El equipo estaba muy preparado mentalmente y muy unido. Luego, cuando ganas lo ves mucho más claro, pero veía algo increíble que podía pasar. El vestuario lo palpaba", apuntó Canales, quien tuvo que interrumpir su entrevista varias veces debido a la emoción, una de ellas justo al final de una intervención que parecía no haber acabado y que, sin embargo, dejó a medio camino ante el aluvión de lágrimas.

Elogios a Joaquín

Por otro lado, hizo referencia al trato recibido por parte de un club que lo va a echar en falta dentro y fuera del vestuario: "He intentado darlo todo y esforzarme en un lugar en el cual me he sentido muy cómodo desde el principio. Estoy muy agradecido porque siempre he tenido mucho cariño y eso ayuda. He aprendido muchísimo de los compañeros y de los diferentes cuerpos técnicos".

"He estado cinco temporadas, cuatro de ellas increíbles y la pasada más complicada. Yo creo que me quedo con todo, pero levantar la Copa del Rey... También he podido compartir muchos momentos con Joaquín, que es un gran amigo y me ha dado mucha felicidad y muchas risas. Estoy seguro de que van a llegar muchos éxitos", concluyó el mediocentro con pasado en el Real Madrid.