"Hay conversaciones, está muy cerca, pero lo dejo en manos de mi representante y del club. Espero que se solucione pronto", ha confesado un Balde con más galones esta temporada.
El pasado verano llegaba como un aprendiz y, sin embargo, lo hizo tan bien que se saltó varios pasos de progresión y terminó forzando la conversión de Marcos Alonso en central y, un año después, el adiós del histórico Jordi Alba.
"Estoy con la misma ilusión y ganas. Mi objetivo es mejorar cada día y seguir aprendiendo", ha explicado con modestia y quitando importancia a ese rol de titular que le aguarda.
Algo que aún deberá esperar a ver este verano tras la cancelación del primer amistoso, contra la Juventus, por culpa de un virus gástrico que afectó al vestuario azulgrana. Uno de ellos, como ha desvelado el propio Balde, fue él. "He sido uno de los infectados, pero ya estamos recuperando fuerzas y el equipo se siente muy bien".
Tanto como para estar deseando que llegue ese duelo ante el Arsenal. "Es un partido de Champions. Todos tenemos ya de empezar a jugar el primer partido, de ver las sensaciones que tenemos".
Esa Liga de Campeones es, precisamente, uno de los grandes objetivos, si no el que más. "Es una tarea pendiente", ha reconocido antes de elogiar a los nuevos fichajes, como Gundogan e Iñigo Martínez. "Son muy buenos, veteranos, con experiencia".