Desde que ingresó en julio de 2001, con tan solo 11 años de edad, hasta ahora, convertido en uno de los mejores defensas españoles a los 33, el madrileño sólo ha conocido un club. 

Un Real Madrid que ha mamado desde aquel alevín A hasta llegar al primer equipo, donde sin poder ser un titular habitual, siempre se ha terminado ganando la confianza de los entrenadores.

Ha sido ese, precisamente, el caballo de batalla de Nacho para que se plantease muy seriamente abandonar la nave blanca en busca de una oportunidad donde no tener que demostrar más que los demás para jugar domingo sí y domingo también. 

Pero finalmente le ha podido la fidelidad y el amor a unos colores que seguirá vistiendo un año más. 

Su polivalencia, capaz de jugar en los cuatro puestos de la zaga, su solvencia, calidad y saber estar son motivos de sobra para que haya podido mantenerse en un club con la exigencia del Madrid. Ahora, además, tendrá otra responsabilidad, la de ser capitán. 

23 títulos

Ha defendido el escudo madridista en esa primera plantilla en 319 partidos y ha conseguido 23 títulos: 5 Copas de Europa, 5 Mundiales de Clubes, 4 Supercopas de Europa, 3 Ligas, 2 Copas del Rey y 4 Supercopas de España.

Nacho ha sido internacional en 24 ocasiones con la selección española, con la que se acaba de proclamar campeón de la Liga de las Naciones 2023. Ahí, saliendo desde el banquillo en la final, fue clave para detener una contra que podría haber dado la victoria a Croacia.