Aranda se puso de gala para recibir a un Real Madrid que estrenó a Güler. Era día de Reyes y Carlo Ancelotti le regaló a todos los aficionados al fútbol el debut de un joven que participó mucho en el juego y desde el primer minuto demostró tener personalidad de sobra para vestir la elástica blanca.
No tardó el ex del Fenerbahce en ser protagonista. Tras unos compases iniciales en los que se asoció bastante y apareció tanto en banda como por el medio, estrelló una falta en la cruceta de la meta defendida por Adrián Álvarez. Para tirar el libre directo, además tiró de carácter y le negó el gusto a un Dani Ceballos que puso cara de pocos amigos.
La Arandina no inquietaba a Kepa y los merengues jugaban a placer. Tal vez una comodidad que les relajó en exceso y les impidió ser todo lo incisivos que deberían. Sin embargo, el otomano no cejó en su empeño en busca de agradar y a punto estuvo de dejar sólo a Brahim para hacer el 0-1. Ya al filo del descanso colocó el balón en la cabeza de Nico Paz, que remató alto.
Una hora duró el debut de Arda, que fue sustituido por Rodrygo cerca del 60’. Para entonces el Madrid ya dominaba con tantos de Joselu y Brahim, en el 54’ y el 55’ respectivamente. A partir de ese momento los ánimos se enfriaron a la espera del inevitable desenlace con el equipo de Primera División clasificándose para los octavos de final.
Desafortunadamente, los que acudieron al estadio se quedaron sin la posibilidad de ver en acción a Jude Bellingham, que estuvo saludando desde el césped a los aficionados burgaleses antes de que los equipos saltaran a calentar. Sí que pudieron ver a Rodrygo sentenciando con el 0-3 mediante un derechazo seco y, además, celebraron el 1-3 en la prolongación.
Jugador Flashscore del partido: Brahim Díaz.
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