Los sucesos paranormales ocurren a veces, aunque hay que creer en ellos para afirmar que han sucedido. Cuando se presentan en el fútbol, la gran mayoría suelen atribuir los estragos que causan a errores garrafales de los jugadores.

Seguramente, eso harán muchos cuando expliquen lo que pasó en el 0-1 del Atlético de Madrid contra el Feyenoord. Sin embargo, resulta demasiado banal y mundano catalogar de fallo estrepitoso lo que hizo Lutsharel Geertruida mientras un balón llovido le impactaba en el cuerpo y se introducía lentamente en su portería.

Al lateral derecho neerlandés se le debió aparecer un fantasma, porque se apartó como si esquivara un ente incorpóreo en lugar de apartarse de la trayectoria del esférico. Incluso llegó a levantar las manos en señal de haber cumplido su cometido, pero cuando regresó a la realidad, las bajó para echárselas a la cabeza. 

Por juego, el Atleti tuvo alguna oportunidad de adelantarse, sobre todo por medio de algún mano a mano de Morata ante Justin Bijlow, aunque no acertó a batirle. Aún desaprovechando las ocasiones claras, se demostró que algún tipo de fuerza desconocida empuja a los rojiblancos en esta Champions y se pusieron en ventaja en la acción menos esperada.

No les desagradaba vibrar en otra frecuencia a los del 'Cholo' Simeone y lo aprovecharon para ampliar distancias con un gol casi más inexplicable que el primero. Mario Hermoso puso un centro a la remanguillé que, por arte de birlibirloque, se coló por encima del guardameta de la escuadra de Róterdam convirtiéndose en uno de los tantos de la temporada.

El más difícil todavía llegó en los últimos minutos. Para compensar lo sucedido anteriormente, los elementos hicieron caer la pelota a plomo sobre la cabeza de Mats Wieffer, que batió a Oblak sin siquiera saltar. Sin embargo, los colchoneros recondujeron el flujo de poder para cerrar la contienda con un nuevo tanto en propia meta, esta vez de Santiago Giménez.

Grandes sensaciones

El Atlético de Madrid se encuentra actualmente en un plano supraterrenal, lo que complica mucho a sus rivales ganarle. Están en ese punto en el que cuando no salen las cosas, algo sucede para que saquen un resultado positivo.

Contra el Feyenoord jugaron bien, pero necesitaron tener algo más de su lado a la hora de llevarse los tres puntos. Unas unidades que clasifican a los madrileños matemáticamente para los octavos de final de la máxima competición continental y emplazan a los neerlandeses a continuar en la Europa League.

Jugador Flashscore del partido: Rodrigo de Paul.

Consulta los datos del Feyenoord - Atlético de Madrid en Flashscore.