Sufrida, trabajada y polémica victoria del FC Barcelona en Oporto. Se sufrió en cada transición defensa-ataque de los dragones. Se trabajó para intentar sacar el balón tocando, para generar juego y para ser efectivo y se quedó un sabor extraño en los seguidores del equipo luso por dos acciones que habrían modificado el curso del encuentro: un posible penalti de Jules Koundé y una mano anulada por el VAR a Joao Cançelo. Lee la crónica del partido aquí.
El Barça extraña a Frenkie De Jong. El neerlandés continúa recuperándose de una lesión. Sin él, la zona medular pierde a un centrocampista extraordinario, que reparte, corta y genera al mismo tiempo. Gavi, como demostró en la noche de este miércoles, es impreciso en el marcaje: comete faltas desmedidas y suele calentarse con facilidad. Su expulsión no supuso un varapalo. Sin embargo, ese fallo, contra un rival de mayor envergadura, sería un problema delicado.
La ausencia de De Jong fue eclipsada por un Ter Stegen heroico. El guardameta culé demostró sus condiciones, llevó la banda de capitán y le impidió al Oporto igualar el marcador. El alemán fue esencial, tanto en la primera como en la segunda parte.
Además de Ter Stegen destacó el desempeño de Ferran. El mediapunta, que es un complemento interesante para Xavi Hernández, aprovechó al máximo la oportunidad que le brindó el cuerpo técnico para sustituir a Robert Lewandowski. Su gol le permitió al Barça sumar de a tres. Con los puntos, los culés ven de cerca la clasificación para la siguiente ronda de la UEFA Champions League.