Campeón del mundo (2010) y de Europa (2008 y 2012) con España, el excentrocampista asistió en Lisboa a la cumbre tecnológica Web Summit, donde habló de su fichaje por el Como, primero para poner fin a su carrera y ahora para asumir el cargo de entrenador.

"Soñamos a lo grande y somos ambiciosos. Creo que vamos por el buen camino y tenemos la mentalidad adecuada. Tenemos que crear esa cultura en el centro de entrenamiento. Eso es lo que intentaré hacer, con mis propias ideas y rodeado de gente competente. Si soñamos a lo grande, podemos llegar (a la Liga de Campeones)", afirmó el exjugador de 36 años.

Fàbregas dirigía al equipo juvenil del Como y el lunes fue anunciado, de forma interina, como entrenador del equipo senior del club transalpino, que marcha sexto en la Serie B, en zona de play-off de ascenso a la máxima categoría del fútbol italiano.

"Me siento muy bien y preparado. Todo ha sucedido muy rápido en los últimos días. Tengo mucho respeto por el entrenador, que llevaba un año y medio al frente del equipo. Es un gran reto para mí. Estoy acostumbrado a la presión y a las exigencias que quiere el club. Son tiempos muy emocionantes", subrayó en el escenario principal de la cumbre tecnológica.

Junto al propietario del club, el indonesio Mirwan Suwarso, Fàbregas se mostró orgulloso de haber puesto fin a una exitosa carrera como futbolista en el Como, donde destacó la "ilusionante visión " de futuro del club, basada en un "buen proyecto".

Felicidad personal y deportiva

"(Llegar a la Serie A) es uno de los principales objetivos, sea cual sea mi posición. Quería ser entrenador del Como, no esperaba que fuera tan pronto, pero es una oportunidad. Es un proyecto a largo plazo, no estoy aquí sólo unos meses. Confío en el club, en la gente y mi familia ha encontrado allí la felicidad", afirmó.

Fàbregas elogió la estructura del club transalpino y se mostró impaciente por "seguir creciendo", teniendo en cuenta que es "una persona muy confiada y positiva" y que le gusta "estar rodeado de gente trabajadora", en un campo del que era simple aficionado desde hace poco.

"No me centré en ser entrenador hasta el cierre. He tenido una buena carrera, he jugado en grandes clubes, y nunca tuve tiempo de sentarme a pensar qué quería hacer después. Uno cree que va a ser futbolista para siempre, pero no es así. Se pasa muy rápido", explica, subrayando su entusiasmo por la nueva experiencia.

Como futbolista, Fàbregas se formó en el Barcelona y, además de en los clubes españoles, también ha sido una figura importante en el Mónaco francés y en el Arsenal y el Chelsea ingleses. De ellos ha opinado.

"El Chelsea está creciendo. Han invertido en la juventud y esperan que los resultados lleguen, quizá no este año, pero sí en los próximos. El Chelsea suele invertir para obtener resultados inmediatos, pero ahora ha invertido para el futuro y es más paciente. El Arsenal creyó en Mikel Arteta y los resultados lo están demostrando. Es el club perfecto para ver cómo creen en una persona y en el proyecto que tiene", analizó.