Ribéry todavía puede hacerlo sobre el terreno de juego, como confirmó en la reciente Copa Franz Beckenbauer, según Kicker. Pocos tenían idea de los problemas de salud del exinternacional francés. En 2022, se vio amenazado con la amputación de una pierna durante su etapa en el US Salernitana italiano. Todo empezó con un dolor en la rodilla.
"El dolor fue empeorando. Dejé de entrenar entre partido y partido, descansé y traté de hacer todo lo posible para que las cosas mejoraran", declaró el subcampeón del mundo en 2006 y ganador de la Liga de Campeones en 2013.
Las pruebas médicas revelaron que a la estrella no le quedaba cartílago en la rodilla, por lo que el jugador se sometió a una operación en Austria. Según los médicos, la intervención salió bien. "Pero tuve una infección en la pierna, todo empeoró tremendamente", describió el francés la situación cuando contrajo una peligrosa infección bacteriana (Staphylococcus aureus).
"Estuve 12 días en el hospital en Austria y estaba muy asustado. Casi me amputan la pierna. En cualquier caso, tuve que poner fin a mi carrera en activo en otoño de 2022", recuerda el exjugador del Bayern. Al final, todo salió bien, al menos en el sentido de que Ribéry puede jugar al fútbol en torneos benéficos y exhibiciones.