Nacido en El Cairo poco antes del cambio de milenio, Omar Marmoush se dio cuenta muy pronto de que él no era un futbolista cualquiera. Su andadura comenzó en las categorías inferiores del Wadi Degla, un club que quizá no sea uno de los grandes del fútbol profesional del país, pero cuyos jóvenes gozan de una excelente reputación gracias a colaboraciones con el Arsenal FC y otros clubes europeos. Fue allí donde Marmoush debutó como profesional en 2016, con tan solo 17 años.
Pero el joven Omar tenía sueños más grandes, que le llevaron a salir de su país en 2017. Encontró su primer hogar en el fútbol europeo en las categorías inferiores del VfL Wolfsburgo. Rápidamente se convirtió en un sólido goleador en el segundo equipo del club de Baja Sajonia antes de debutar finalmente en la Bundesliga en 2020. Para adquirir experiencia, primero fue cedido al FC St. Pauli y más tarde al VfB Stuttgart.

Esos años le moldearon: Marmoush se hizo más rápido, más fuerte y, sobre todo, más implacable de cara a portería. Pero seamos sinceros, ¿qué observador del fútbol alemán le habría creído capaz de esta meteórica evolución? El Wolfsburgo no pudo acordar una prórroga de su contrato, por lo que Marmoush se marchó libre al Eintracht de Fráncfort a la edad de 24 años. Muchos esperaban que desempeñara un papel complementario, pero en retrospectiva iba a ser el pistoletazo de salida de su carrera.
Ya en los primeros meses de su estancia en la ciudad del Meno, quedó claro que era mucho más que un delantero normal de la Bundesliga. Desde el verano de 2023, el egipcio parece haberse desatado, marcando la increíble cifra de 57 goles en 67 partidos con el Fráncfort, participante en la Copa de Europa. Ya fuera en la Bundesliga, en la Copa o en la competición europea, Marmoush ha ofrecido constantemente actuaciones de talla mundial a lo largo de 18 meses.
Marmoush se va como un héroe
A pesar de su fulgurante ascenso, su personalidad parece haber cambiado muy poco. Fuera del terreno de juego, se le considera una persona realista y leal, cualidades poco frecuentes en el glamuroso mundo del fútbol profesional. Desde su emotiva despedida de la afición de Fráncfort tras la victoria contra el Borussia Dortmund, ha quedado claro que el jugador de 25 años dejará el Eintracht como un héroe.
Además de la nacionalidad egipcia, Marmoush también tiene la canadiense, lo que recuerda que sus padres vivieron varios años en Canadá antes de regresar a El Cairo. "Llevo a Egipto en el corazón, pero Canadá ocupa un lugar en mi historia", reveló Marmoush en una entrevista. Su origen multicultural le caracteriza, y quizás sea precisamente ese origen lo que le convierte en un jugador tan adaptable y versátil.
El hecho de que Pep Guardiola y el Manchester City hayan puesto sus ojos en Marmoush puede resultar sorprendente a primera vista, ya que sólo lleva un año y medio jugando al máximo nivel. Pero cualquiera que haya seguido al jugador de 25 años en los últimos meses sabe que este atacante de 1,83 metros es un auténtico todoterreno. Puede mantener ocupada a una defensa por sí solo en el centro del ataque, pero también puede jugar por las bandas. Su velocidad, unida a un gran olfato de gol y a su capacidad técnica, le convierten en una pesadilla para las defensas.
Con los pies en el suelo y los nervios a flor de piel
El City busca precisamente eso: flexibilidad en ataque. Con Erling Haaland como hombre gol, Marmoush podría brillar a su lado o como extremo y destrozar las defensas rivales con su dinamismo. También es conocido por su incansable compromiso y su capacidad de entrega en los momentos clave, un factor que nunca debe subestimarse en el tanque de tiburones que es la Premier League.
Una auténtica baza es su fuerza mental. A pesar de su juventud, ya ha vivido muchas cosas, como la transición del fútbol egipcio al europeo o los retos que supusieron sus cesiones. Esta experiencia, combinada con su pasión contagiosa, podría convertirlo en un valioso fichaje para los Sky Blues.
El precio del traspaso, que se rumorea en torno a los 80 millones de euros, es una clara señal de lo mucho que el City cree en Marmoush. Pero la presión es enorme: la Premier League está considerada la liga más dura del mundo y los seguidores del City no esperan menos que la perfección. ¿Podrá Omar Marmoush estar a la altura? Si su carrera hasta la fecha sirve de indicador, hay muchas posibilidades de que el egipcio brille también en el gran escenario.