El campeón alemán dejó a Mané fuera de un partido amistoso, publicando en Twitter: "Sadio Mané está en negociaciones contractuales sobre un cambio de club y por lo tanto no está en la alineación de hoy".
La exestrella del Liverpool, de 31 años, se convertirá en el último jugador de alto nivel en unirse a la rica liga saudí.
Bild y la revista Kicker informaron de que estaba de camino para pasar el tradicional reconocimiento médico con el Al-Nassr.
Mané sería otro fichaje importante para el club que dio el primer golpe de efecto de una serie de fichajes por parte de clubes saudíes al atraer a Cristiano Ronaldo, cinco veces Balón de Oro.
Mané ganó la Liga de Campeones y la Premier League en seis temporadas con el Liverpool y fue una pieza clave del devastador tridente ofensivo de Jürgen Klopp con Mohamed Salah y Roberto Firmino.
Cuando el Liverpool ganó su primer título de la liga inglesa en 30 años en la temporada 2019-2020, interrumpida por la pandemia, Mané marcó 18 goles. Pero en el verano de 2022, cuando ganó el premio al Jugador Africano del Año, Mané decidió que quería un nuevo reto: rumores no confirmados decían que se había cansado de compartir protagonismo con el egipcio Salah en Anfield.
El Bayern hizo una gran apuesta por Mané, prometiendo convertirlo en el eje de un ataque que acababa de perder los servicios de Robert Lewandowski a manos del Barcelona. Tras un buen inicio de temporada en el Bayern, pronto quedó claro que Mané no estaba encajando en Baviera.
En noviembre, en un partido de la Bundesliga contra el Werder Bremen, Mané sufrió una lesión en el peroné y su temporada quedó en suspenso. La lesión le obligó a perderse el Mundial de Qatar a finales del año pasado, en un duro golpe para las opciones de Senegal.
Aunque Mané regresó al equipo, sus problemas se pusieron de manifiesto cuando se vio envuelto en un altercado físico con su compañero Leroy Sané tras una derrota en la Liga de Campeones ante el Manchester City.
Al parecer, el Bayern multó a Mané con unos 350.000 euros y le impuso un partido de suspensión por su participación en el incidente. El africano terminó la temporada con un decepcionante balance de 12 goles en 38 partidos en todas las competiciones.
Le quedan dos años de contrato con el Bayern.