Batalla sin cuartel en el AT&T Stadium que terminó con victoria de unos Dallas Cowboys que supieron gestionar mejor el ovoide en el tramo final. Pese a ello, el intercambio de golpes fue brutal y constante durante toda la contienda.
El duelo de quarterbacks contó con un altísimo nivel, pero hubo un actor invitado que se robó todos los focos. Fue el receptor estrella de los Seattle Seahawks, DK Metcalf, que atrapó seis pases para un avance de 134 yardas y tres touchdowns por aire.
La velada dejó abierto el debate acerca de si Dak Prescott debería ser considerado como candidato al MVP. Con sus 299 yardas y tres servicios de anotación, el mariscal de la franquicia texana, se colocó primero en la clasificación de touchdowns entregados con 26 y tercero en la de distancia lanzada merced a sus 3.234 yardas.
Más allá de todos esos números que tanto destacan, hay que poner el foco sobre la fantástica eficiencia del '4' de los Cowboys, que tiene el mejor rating (108.3) de los directores de orquesta titulares de la NFL en lo que va de curso y un 70,1% de acierto en sus pases.
En el otro lado de la parrilla, Geno Smith presentó su nivel más alto contra un gran equipo, algo que no sucede habitualmente. Repartió tres touchdowns por vía aérea y consiguió otro mediante la carrera. Además, distribuyó pases para sumar un avance de 334 yardas. Desafortunadamente, en el último 'drive' del partido, con tiempo de sobra para ganar, le tembló el brazo.
Un extraño récord
La valentía acompañó a los equipos a lo largo de todo el choque. Tanto fue así, que prefirieron arriesgar en las cuartas oportunidades (1/2 para Dallas y 0/3 para Seattle) antes que realizar 'punts'.
De ese modo firmaron el quinto partido en la historia de la liga de fútbol americano sin despejes. Los anteriores fueron un Bills - 49ers (Semana 2, 1992), Packers - Bears (Semana 4, 2014), Packers - Saints (Semana 8, 2014) y Chiefs - Eagles (Semana 4, 2021).