El delantero Pedro, a los 15 segundos, y el lateral derecho uruguayo Guillermo Varela, en el minuto nueve, marcaron los goles del equipo de Río de Janeiro.
El Mengão fue dominante, pero dejó vivo a su rival, que tuvo como figura al portero Fernando Muslera y que descontó en el minuto 90+1 con diana del atacante Guido Carrillo.
Los cariocas acabaron con 10 hombres, pues el ecuatoriano Gonzalo Plata fue expulsado por doble amonestación en el 82'.
"Por una catástrofe de árbitro, pasó lo que pasó", dijo en rueda de prensa el entrenador rubro-negro, Filipe Luís, al criticar con dureza la segunda amarilla que el principal colombiano Andrés Rojas mostró a su jugador, así como otras decisiones.
"No tenemos que reclamar, no tenemos que bajar la cabeza; por el contrario, fue una victoria importante", dijo, sin embargo, Pedro a la transmisión oficial de televisión.
El próximo jueves será la vuelta en La Plata El ganador enfrentará en semifinales al triunfador de la eliminatoria entre Racing y Vélez Sarsfield, en la que La Academia tomó ventaja el martes al ganar 1-0 como visitante.
Inicio a toda máquina
Sin perder tiempo, el Flamengo respondió a su condición de favorito en busca de una cuarta Libertadores tras las ganadas en 1981, 2019 y 2022.
Pedro, en segundos, puso en ventaja al conjunto de Filipe.
El centrodelantero presionó, robó un balón al borde del área y combinó con G. Plata, quien le devolvió la pelota. El '9' recibió de espaldas a la portería, con un adversario encima, y giró para batir al meta uruguayo con un tiro raso.
Su diana es la segunda más rápida en esta Libertadores, tras la firmada por Artur, del Botafogo, a los 14 segundos de su partido contra Liga de Quito en la ida de los octavos.
El récord absoluto tiene casi 50 años, impuesto por el peruano Félix Suárez al marcar a los seis segundos del encuentro del 4 de abril de 1976 entre Alianza Lima y el colombiano Independiente Santa Fe, en la victoria por 3-0.
Y ni siquiera se cumplían 10 minutos cuando Varela aumentó distancias. Fue una jugada de lateral a lateral, con un remate del charrúa de volea a centro de Ayrton Lucas.
Muslera sale al rescate
Si no fuese por F. Muslera, Estudiantes hubiese dejado el Maracaná con un marcador adverso más abultado.
El juego era un monólogo del Fla. Su centro del campo, con el español Saúl Ñíguez y dos paisanos del guardameta uruguayo, Nicolás de la Cruz y Giorgian de Arrascaeta, se imponía.
Una intervención milagrosa ante el autor del 1-0 inició la exhibición de Muslera, que luego le negó un par de veces el gol a Lino y también cumplió ante una intentona de Plata.
Estudiantes equilibró en la segunda mitad con la decisión del técnico Eduardo Domínguez de dar ingreso a Gastón Benedetti. Los platenses, eso sí, se vieron beneficiados por una lesión de Saúl.

El técnico local refrescó, sin poder sacar mayor ventaja, lo que abrió paso a un accidentado cierre por la expulsión.
Y Estudiantes resucitó: un cabezazo de Carrillo hizo volar a Rossi al borde del final, poco antes de que el propio atacante aprovechara un balón rifado para el descuento, con un remate que se desvió en el central Léo Pereira antes de anidar en la red.
"Era esperar nuestro momento. En nuestra casa va a ser diferente", advirtió Domínguez.