Bilbao y el futbol español están de luto. Uno de los jugadores más legendarios del club vasco, José Francisco Rojo Arroita, más conocido como Rojo I o Txetxu Rojo, falleció este viernes acompañado de sus familiares más cercanos.

El mítico 11 del Athletic fue uno de los ejemplos más paradigmáticos del jugador fiel a su escudo por excelencia, puesto que en toda su carrera no vistió otros colores que no fueran los rojiblancos a lo largo de 17 temporadas comprendidas entre 1965 y 1982, en las que anotó 67 goles en 541 encuentros. Una cifra, esta última, que solo José Ángel Iribar pudo superar en la larga historia de los Leones.

Aunque si pasó a la historia del conjunto vasco no fue solo por sus tantos sino también por su talentosa zurda y la calidad de sus pases y centros, lo que sirvió para que el compositor Carmelo Bernaola, que también escribió el himno del Athletic, le calificara como "el Mozart del fútbol".

En el palmarés del extremo izquierdo destacan dos Copas del Generalísimo ganadas en los años 1969 (1-0 al Elche) y 1973 (2-0 al Castellón), además de varios subcampeonatos como el logrado en la Copa de la UEFA de 1977, donde solo la diferencia de goles en campo rival (1-0 en Turín y 2-1 en San Mamés) hizo que la Juventus de Giovanni Trapattoni impidiera el que habría sido el único título europeo del club bilbaíno en su historia. 

Su calidad le llevó a ser internacional en 18 ocasiones entre 1969 y 1978 con la selección española, en las que marcó tres goles ante Suiza, Chipre e Irlanda del Norte, aunque nunca llegó a disputar un gran torneo.

Una amplia carrera como entrenador

Cuando Txetxu Rojo colgó las botas (se le hizo un bonito homenaje en 1982 con un partido del Athletic contra la selección de Inglaterra), no podía comenzar su carrera como entrenador en otro lugar que en el club de sus amores, siguiendo los mismos pasos que como jugador. Tras pasar por todas las categorías inferiores desde alevines, se sentó en el banquillo del Bilbao Athletic en la 86-87 y luego, primero como ayudante y después como entrenador principal, se encargó del primer equipo en la 89-90 (volvería en la 2000-2001 para cerrar el ciclo con 70 partidos oficiales dirigidos).

Además, Rojo fue el técnico del Celta, Osasuna, Lleida, Salamanca, Zaragoza (en dos etapas) y Rayo Vallecano, que fue su último equipo hasta que se retiró en 2004. No pudo levantar ningún título en esta etapa de su carrera, aunque llegó a una final copera con el equipo vigués en 1994 y estuvo peleando hasta la última jornada en la liga del año 2000 con los maños. Toda una vida en el mundo del fútbol de un hombre que dejó una huella imborrable en la memoria de los aficionados.