Se acabaron las pruebas antes de la cita mundialista de Catar. La siguiente vez que los jugadores de la selección se enfunden la elástica roja será ya en modo competición ante Costa Rica el próximo miércoles 23 de noviembre.
Para el amistoso ante Jordania en el Amman International Stadium de Amán, Luis Enrique, como había avisado, quiso repartir minutos entre todos los jugadores disponibles, habida cuenta de las ausencias obligadas por problemas físicos de Morata, Llorente, Guillamón y Gayà.
Funcionó la dupla Fati-Asensio
De inicio, el técnico asturiano optó por introducir en el once a Marco Asensio (26) como falso nueve. El mallorquín hizo gala de la movilidad y recursos que su entrenador había destacado de él y, fruto de sus movimientos bajando a recibir a línea de tres cuartos, llegó el primer gol. En una posesión eterna de la selección, Soler combinó con el madridista y este, desde la frontal del área, abrió a la izquierda hacia Ansu Fati, que disparó centrado pero encontró la red al aprovecharse del error del portero Al Fakhouri, dándole la razón a un Luis Enrique que en la previa había depositado toda su confianza en el joven extremo. Hacía 802 días que el atacante del Barcelona no estaba en el once de la selección y fue de los mejores, con una continua sensación de peligro y demostrando una gran conexión con Asensio.
Como es lógico con el nivel de ambas selecciones, España dominó en todo momento y tuvo multitud de ocasiones claras durante los primeros 45 minutos, aunque faltó precisión en el golpeo para incrementar la ventaja. Por poner un pero, Jordania creó peligro las pocas veces que se animó en ataque, evidenciando una fragilidad defensiva española que se hizo patente cuando un error de Pau Torres, que perdió un balón cerca de su área, le dio la oportunidad a Al Naimat, que se plantó delante de Robert Sánchez pero prefirió optar por la potencia en vez de por la colocación y el meta del Brighton detuvo su disparo.
Muchas pruebas en la segunda mitad
Los problemas defensivos de España continuaron nada más reanudarse el encuentro. David Raya, que pasó a ocupar la portería, tuvo más trabajo del esperado al principio, aunque la caraja de los de Luis Enrique duró cinco minutos. Los que tardó Gavi en incorporarse al área, encontrar un balón suelto producto de un tiro defectuoso de Sarabia y cruzar el balón para marcar su segundo gol con la absoluta.
La segunda mitad sirvió para dar descanso a varios jugadores y que los suplentes cogieran ritmo. También para probar otras opciones tácticas, como la presencia de Ferran Torres como delantero centro moviendo a la banda derecha a Asensio, que fue uno de los tres futbolistas que disputaron los 90 minutos junto con Pau Torres y Soler. La juventud se dio paso en estos instantes y volvió a dar muestras de su brillante futuro, como se pudo ver en el 0-3. Yéremi Pino conectó con Nico Williams en la frontal, que hizo un gran control orientado y se sacó un zurdazo pegado al palo con el que estrenó su cuenta goleadora con España y que Luis Enrique celebró como habría celebrado un gol en la final del Mundial. Todavía hubo tiempo para el gol del honor de Jordania, obra de Al Daradreh en el minuto 91, que desató el júbilo en la grada para que todo el mundo acabara contento en el amistoso en Amán.
En resumen, buena última prueba de la selección española, que viajará a Catar para tratar de hacer realidad los deseos de Luis Enrique, que afirmó que espera poder jugar siete partidos en el país árabe. El primero de ellos, el miércoles ante Costa Rica.